RENOVARSE
desfiles previstos para febrero, y en abril, Saint Laurent y Gucci anunciaron que solo lanzarán colecciones basándose en criterios creativos, no en imposiciones estacionales.
LA MODA EN TIEMPOS COVID
Más allá de las mencionadas elecciones, descubrimos la verdadera dimensión de la distancia social, el teletrabajo y demás restricciones durante la semana de la moda de Shanghái, celebrada en marzo: la primera totalmente digital y al estilo see-now-buynow. ¿El resultado? Atrajo a 11 millones de espectadores y recaudó más de dos millones de dólares en ventas a consumidores inmediatos durante las retransmisiones en directo. Una victoria absoluta.
Le siguió la semana de la moda rusa, cuyo Consejo de la Moda se asoció con Tik Tok para hacer partícipes a sus usuarios. En cuanto a la londinense, a pesar de no mostrar muchas colecciones ni contar con grandes marcas, triunfó por sus vídeos de behind the scenes, entrevistas, paneles de discusión y showrooms virtuales en la plataforma LFW. Más tarde, en julio, cuando tradicionalmente se presenta la alta costura y la moda masculina de otoño-invierno, así como las colecciones crucero, multitud de firmas sustituyeron de nuevo los desfiles por otros formatos para afrontar una nueva realidad que marcará el futuro de las fashion weeks. Hablamos de fashion films (Dior, Chanel, Prada, Maison Margiela), performances (Gucci) o conciertos (Azzaro, Dries Van Noten), pero también del show-in-a-box de Loewe. Una caja enviada por correo a los invitados, ofreciéndoles una dosis de realismo con retales. "En esta época prima lo que es correcto para la gente, no para el sistema", declaró Jonathan Anderson. "Al final, somos humanos... Y como humanos, naturalmente queremos tocar las cosas".
Y con este estilo experimental prosiguieron los desfiles de la nueva normalidad: del show entre campos de trigo de P-V 2021 de Jacquemus a la semana de la moda de Copenhague (la primera ciudad con un calendario de desfiles significativo).
Al cierre de esta edición, se ha confirmado la presencia de solo unas cinco firmas de renombre en la fashion week neoyorquina, aunque aún se desconoce el formato. El