DÍAS 1 Y 2
viene precedida por la expectación que genera enfrentarse a un reto desconocido no solo en lo físico, sino también en lo psicológico. Para Alejandro es un momento muy esperado: "Estos cuatro años han sido una locura. He pasado periodos de mucha ansiedad y he tenido que luchar para que el entorno social no me devorara. Hay veces que hasta me costaba pensar con claridad. Tenía muchas ganas de parar y verlo todo con perspectiva… Necesitaba descansar. Si no desconecto, puedo acabar asfixiando mi creatividad".
llega el momento de la prueba PCR para descartar un positivo en COVID-19. Las veinticuatro horas siguientes, hasta que se obtienen los resultados, toca permanecer en la habitación. No obstante, el protocolo de ayuno comienza desde el primer momento. Tras una completa analítica llega la primera comida: un plato de arroz y verdura. Para cenar, fruta.
La cita con el Dr. García-Verdugo, director médico de la clínica, incluye una revisión completa, el estudio de los resultados de las pruebas y la programación del contenido de la estancia, según tus objetivos. Alejandro los tenía claros: "despejar mi mente y revisar lo que ha pasado en este tiempo. Hacer una introspección desde el momento en que volví de Londres hasta hoy".
– un caldo de verduras– hay que tomar una solución salina que producirá una limpieza intestinal en profundidad. Así el cuerpo estará en perfectas condiciones para afrontar un ayuno prolongado y maximizar sus beneficios. Por la noche, otro caldo reconforta el estómago.