JÚPITER EN ESCORPIO
Desde el otoño de 2017 Júpiter está ya transitando por el apasionado y belicoso signo de Escorpio. A primera vista esto parecería muy poco tranquilizador, sobre todo, después de lo que estamos viendo. Sin embargo Júpiter es el más benéfico de los planetas y siempre sacará lo mejor del signo por el que transita. André Barbault en su “Tratado práctico de astrología” dice que cuando Júpiter pasa por Escorpio, “es el poder del águila del astro y del signo el que se afirma: magnetismo, voluntad, autoridad, ambición, instinto creador, cualidades soberanas”. En cualquier caso favorece los excesos y actitudes radicales, la intensidad, los retos y los riesgos. Grandes procesos de transformación y renacimiento, llegar al límite de las posibilidades, luchar por una causa concreta y llevarlo todo a sus últimas consecuencias. En un mundo como el actual, lleno de violentas tensiones y graves conflictos, al igual que sucede en nuestro propio país, la llegada de Júpiter a Escorpio no constituye una noticia demasiado positiva, aunque saque el mejor lado del signo. Aumentará además el riesgo de que todas estas tensiones se solucionen de forma violenta y que los radicales terminen imponiéndose.