Le Senne reclama no utilizar la lengua como «arma arrojadiza»
Tira de argumentario de Vox, apela a la libertad y dice «se puede llevar el caballo al río, pero no obligarle a beber»
El presidente del Parlament de Balears, Gabriel Le Senne, de Vox, aprovechó ayer su primer discurso institucional con motivo del Dia de les Illes Balears –que recuerda la entrada en vigor del Estatut d’Autonomia de les Illes Balears hace 41 años– para tirar de argumentario de su partido, defender la «libertad lingüística», frente a imposiciones que – dijo– no han tenido efecto; hacer una defensa de la familia, «que se ve seriamente amenazada», como «célula básica de la sociedad y escuela de valores» y señalar que, este asunto, debería ser «uno de los primeros que «tuviéramos sobre la mesa».
Le Senne –que hace un mes frenó un intento de deponerle del puesto por parte de su grupo parlamentario– insistió mucho en la idea de «libertad» y, en relación a la lengua, explicó que no debía utilizarse como «arma arrojadiza».
Sólo empleó el catalán –aunque ‘salando’ al estilo que defienden entidades que cuestionan su unidad y sin citar en ningún momento el nombre de la lengua que utilizaba– para referirse a «la riqueza lingüística que hace las delicias de propios y extraños» y para indicar que «está en fase de regresión pese a las políticas de las últimas décadas». Le Senne citó un estudio de la UIB referido a la población de entre 15 y 29 años
para reforzar sus palabras.
El presidente de la Cámara dijo que hay que «desterrar para siempre el nocivo discurso de que el uso de una lengua implica el odio y el desprecio de la otra». Y añadió: «Se puede llevar el caballo al río pero no obligarle a
beber». En su opinión, cualquier política que conduzca al conocimiento efectivo de «nuestras modalidades insulares» debe hacerse de manera «amable».
Turismo y vivienda
Le Senne, que comenzó su dis
curso recordando a Jeroni Albertí (fallecido el pasado 22 de febrero), dedicó la mayor parte de éste a la familia, que es uno de los puntales del argumentario de Vox. El presidente de la Cámara afirmó que este asunto debía estar en el centro del debate político y que «al igual que con las lenguas, no puede ni debe plantearse desde ninguna imposición».
Le Senne consideró que la familia «se ve seriamente amenazada», se refirió a la baja natalidad, afirmó que «la realidad es que en Balears nos estamos quedando sin niños» y que la crisis demográfica había destapado el problema de la soledad. Indicó que «hay una verdadera pandemia de ancianos desamparados» y dijo: «Si bien la inmigración quizá pueda compensar parcialmente la caída de la fecundidad desde el punto de vista económico o del mercado, nunca lo hará desde el punto de vista de la desaparición
FAMILIA El presidente de la Cámara señala que la familia está amenazada y dice que la inmigración no basta para recuperar su esencia
«Hay que desterrar para siempre el nocivo discurso de que el uso de una lengua implica odio a otra»
Gabriel Le Senne PRESIDENTE DEL PARLAMENT
de lazos familiares».
El tercer eje del discurso de Gabriel Le Senne se centró en el turismo y en cómo este, y la llegada de nuevos residentes, afecta a la vivienda y a la protección del territorio Afirmó que se precisa una «apuesta clara por el turismo de calidad» pero que «en mi humilide opinión la respuesta no puede ser tratar de congelar el tiempo».
La tesis del presidente de la Cámara es que «es imposible dejar de construir y que la vivienda se abarate», que «no toda construcción tiene que afear el pasiaje» y que «la protección no puede derivar en prohibición total». Y cerró la intervención presentando el resultado de las elecciones autonómicas del pasado mayo como «algo muy relacionado con la defensa de la libertad».
El discurso no gustó al portavoz socialista, Iago Negueruela, que dijo que «es muy de la ultraderecha, no representa a las Islas, sino solo a Vox y al PP, que asume sus postulados.
La opinión de Sebastià Sagreras, portavoz del PP, es que el presidente de la Cámara había defendido «el bilingüismo cordial» y que su partido estaba de acuerdo.