Tira para soltar tu mejor forma
POCAS RUTINAS DESARROLLAN UNA FUERZA Y UNA RESISTENCIA DE CUERPO TOTAL COMO EL REMO. DOMINA TU POSTURA EN EL REMOERGÓMETRO Y NO SÓLO GANARÁS MÚSCULO EN ESPALDA Y PIERNAS SINO QUE TAMBIÉN PREPARARÁS TU CUERPO PARA NUESTRO FLAMANTE TEST 2K.
1
Remo con brazo estirado
60 Segundos, 3 series
Transferir la fuerza de las piernas a la espalda es fundamental para conseguir una remada potente. Parte de la misma posición que para un remo normal, con los brazos estirados (A) pero, en lugar de doblar los brazos para acercar el manillar al pecho, mantenlos rectos durante todo el movimiento. Asegúrate de que juntas los omóplatos para abrir la espalda en el momento en el que estiras las piernas (B).
3
Remo sin sujeción en los pies
60 Segundos, 3 series
Para dejar de tirar con demasiada fuerza al estirar las piernas, mantén los pies en los soportes pero quita las cintas de sujeción (A). El objetivo de este ejercicio es trabajar piernas y espalda, y no tanto la fuerza con la que tiras. Asegúrate de presionar con todo el pie (B). Inténtalo primero con un pie sujeto con la cinta para no salir volando del asiento.
2
Remo de piernas
60 Segundos, 3 series
Las piernas son las responsables del 60% de la potencia total de tus remadas así que es importante ganar fuerza en ellas. Con los brazos rectos (A), ve hacia los pies pero esta vez mantén los hombros delante de la cadera todo el tiempo. No abras la espalda al final del movimiento. Mejor inclínate ligeramente hacia delante cuando estires las piernas (B).
4
Remo con pausa
60 Segundos, 3 series
Al contrario de todo lo que has visto en los gimnasios, tu remada no acaba en el pecho. Para poner fin a este hábito, tira del manillar y aléjalo inmediatamente del cuerpo llevándolo delante de las rodillas (A). Aguanta un segundo, dobla las rodillas y deslízate hacia delante (B). De esta manera, el recorrido del manillar se mantiene horizontal impidiendo que la cadena rebote.