4 LA FUSIÓN VERTEBRAL ACABA CON EL DOLOR LUMBAR
EL ORIGEN
Entre las vértebras de la columna tenemos unos discos cartilaginosos que amortiguan los impactos. Con el paso del tiempo, el deterioro de estos discos provoca micromovimientos que pueden causar dolor. Asimismo, se puede producir un pinzamiento de los nervios raquídeos que genera un dolor radiante en las piernas. En una radiografía, un TAC o una resonancia, el estrechamiento del espacio intervertebral a menudo se interpreta como una degeneración de los discos y la causa del dolor. Así pues, parece lógico pensar que fusionar dos vértebras y/o quitar hueso podría limitar los micromovimientos, crear más espacio para los nervios y aliviar el dolor. A la luz de este razonamiento, la fusión vertebral (o artrodesis) se ha convertido en el tratamiento quirúrgico más habitual para tratar patologías de la columna.
LA VERDAD
Según un reciente estudio, hasta el 40% de las personas que se someten a una operación de columna continúan experimentando un dolor considerable. Y no nos engañemos: incluso con los avances médicos actuales, aún resulta muy difícil encontrar la causa concreta del dolor lumbar. El 85% de las veces se acaba definiendo como un dolor “inespecífico” (es decir: no se logra identificar la causa). Si sufres de dolor lumbar crónico, antes de ponerte en manos de un cirujano, agota las opciones menos radicales: ejercicio, fisioterapia...