Men's Health (Spain)

SÉ UN BUEN PADRE

10 consejos para divertirte con los más pequeños.

- POR ROB CORDDRY*

1 Incúlcales aficiones

Si eres una persona entusiasta, ellos también lo serán. ¿Juegas al golf? Hazte con un kit casero y pasa un buen rato con su juego corto mientras aprovechas para practicar un poco.

2 Disfruta en bloque

Si no tienes ningún juego de Lego, va a ser imposible que nos entendamos y te recomendam­os que no sigas leyendo. ¡Los juegos de Lego son el mejor invento del mundo! Hazte con unos cuantos bloques y construye lo que se te ocurra.

3 Juega a “perderte” por el camino

Sube a tus hijos en el coche y, por turnos, que te vayan diciendo que gires a la derecha o a la izquierda hasta que “os perdáis”. Después, por turnos, intentad encontrar el camino de regreso a casa. ¡Sin GPS se pasa mejor!

4 Aprende a contar un cuento

No es necesario que te estudies por completo El Principito. Piensa en el cuerpo y en el final de la historia antes de empezar y desarrólla­la. Crea alguna conexión entre el cuento y sus vidas. Los dejarás boquiabier­tos.

5 Deshazte de ellos

Juega con ellos unas cuantas veces a buscar el tesoro. Puedes esconder algunos de sus juguetes en lugares imposibles. Así tendrás tiempo para sentar el culo en el sofá.

6 Recurre a la televisión

¡Pobre televisión! Ha vivido tiempos mejores. Los padres disfrutaro­n de sus beneficios. Después, nuestra generación llegó al poder y lo echó todo a perder. Pero seamos claros: la televisión todavía merece un respeto. Recurre a ella en los aviones o cuando te quedes sin ideas.

7 Muestra firmeza en el parque

Gestiona las peleas del parque de manera digna y respetuosa. Deja que tus hijos lo resuelvan antes de que te acabes cabreando con otro padre. Hay bastantes posibilida­des de que, igual que tú, sólo quiera poder sentarse un poco después de un interminab­le sábado.

8 Llévalos de camping (o algo así)

Monta una tienda de campaña (o un amago) en el salón y pasa la noche ahí con tus hijos. Enciende las linternas, cuenta historias de miedo… Cuando se queden dormidos, haz lo mismo que hiciste en tu campamento de la infancia: escápate al campamento de las chicas (tu habitación) para verte con la chica que te gusta (tu mujer) y puede que incluso te salga bien la jugada.

9 ¡Haz experiment­os!

Llévalos a la cocina y mezcla de todo, incluidos los clásicos gusanitos con Fanta. ¡Les encantará! Luego, ya os podréis poner a hacer recetas en serio.

10 Sal a la calle

El universo de los niños de hoy se centra en torno a un montón de gadgets. Desconécta­los. Apaga la tablet y llévatelos a la calle a recordar los juegos de tu infancia. No hay nada como un padre disfrutand­o con el pilla-pilla. En serio.

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