Orgasmo musical en una butaca
SALA BARTS – BARCELONA
Cuatro años después de su última cita Andrew Latimer y los suyos se presentaron en Barcelona bajo el auspicio del disco ‘Moonmadness’ un álbum grabado en 1976 donde los ambientes circundantes y envolventes predominaban en sus tracks y con una característica que le diferenciaba de los predecesores, ‘Mirage’ (1974) y ‘The snow goose’ (1975) la apuesta por una gran presencia de la voz lo que lo hacía más sugestivo si cabe.
Y como soluciono Latimer el gran repaso a los seis temas que interpretaron de ‘Moonmadness’, donde predominan las voces, sencillo con un excelente multinstrumentista Pete Jones, que se lució como vocalista, teclista y saxofonista y el bajista Colin Bass que brilló en ‘Spirit of the water’.
Camel diferencio en dos actos su concierto lo inicio con ‘Air Born’ donde Andrew Latimer desenfundo la flauta y su magnífica Gibson Les Paul para deleitarnos, pero sin aspavientos sin protagonismos, sencillamente mágico. En Lunar Sea cerré los ojos y me vi en el sofá de casa de mis padres 40 años atrás. Es cierto que Andrew es un hombre sufrido, enfermizo y que en el escenario cuenta con el apoyo de sus polvos secantes y su muñequera carpiana pero bendito sea porque toca como dios.
El segundo acto arranco con Uneven song del disco Rain Dances del 77 fue el preludio al repaso que harían de algunos de los temas mas importantes de la carrera de Camel, repasaron 3 temas de Dust and Dreams ‘End of the Line’ ‘Hopeless Anger’ y ‘Mother Road’ que sonó especialmente musculosa.
Las armonías vocales de Colin Bass, Pete Jones y Latimer funcionaron perfectamente en los temas que lo requerían, Latimer empezo a interactuar con el publico eso si con moderación. El rictus de su cara delataba la felicidad que le produce tocar su Gibson Les Paul. ‘Long Goodbyes’ fue el preludio sentimental perfecto a un final de fiesta magnifico con ‘Lady Fantasy’ que sin duda alguna define una de las mejores bandas ‘tapadas’ del rock sinfónico ingles de los setentas.
Sin duda que este año vamos a cerrarlo haciendo un balance positivo de las visitas de grandes iconos del rock mundial que han pasado por el país Roger Waters, Queen y ahora Camel.