SOFT MACHINE
“Hidden Details” PUNTUACIÓN: DYAD RECORDS
Estamos ante el primer álbum publicado bajo el nombre de “Soft Machine” desde 1981. La mítica banda británica, inicialmente conformada por Robert Wyatt, Mike Ratledge, Kevin Ayers y Daevid Allen, se dio por desmantelada tras el lanzamiento de su décimo álbum de estudio, ‘Land of Cockayne’, ya desprovista de todos sus miembros fundadores. Desde entonces, muchos de los músicos que pasaron por sus filas se han reunido, rebautizándose como “Soft Works” o “Soft Machine Legacy”, como si de secuelas se tratasen. Tres décadas después renace de la mano de tres de sus últimos integrantes. John Marshall a la batería (miembro desde 1971), Roy Babbington al bajo (miembro desde 1973) y John Etheridge a la guitarra (miembro desde 1975), acompañados de Theo Travis a los vientos y el piano Fender Rhodes. Las incontables facetas musicales de esta banda se manifestaron en una continua evolución de su sonido a lo largo de sus escasos quince años de trayectoria. Desde la psicodelia, pasando por el jazz más experimental y caótico, la música fusión minimalista y el rock progresivo de la denominada “escena Canterbury”, hasta las influencias new wave. ‘Hidden Details’ aúna dos de las épocas clave de la banda. Se mantiene en la línea de los discos ‘Bundles’ y ‘Softs’, con un notable protagonismo de la guitarra en un ámbito más cercano al rock progresivo; pero rescatan también el protagonismo que tenían los vientos en su época más jazz fusión, de comienzos de los 70, y que se aprecia en sus discos como ‘Fourth’ o ‘Fifth’. La repetición de mantras inmersos en las cambiantes estructuras termina dejando una sensación de “coherente desorden”. Los temas que mejor resumen todo esto podrían ser la pieza homónima o “Life on Bridges”, en la que alcanzan unos niveles de frenetismo desbordantes. El trabajo de Etheridge a la guitarra se me antoja exquisito, especialmente en los solos de “Broken Hill” y “One Glove”, y se hace muy notable la influencia de su predecesor en la formación, Allan Holdsworth. También debo destacar es la maestría y elegancia de Travis a la flauta travesera y al saxofón, algo de lo que ya ha dado muestras a lo largo de su carrera musical, colaborando con artistas como Robert Fripp o Steven Wilson. En resumen: una exhibición de maestría y un álbum digno del nombre “Soft Machine”.