JONATHAN BARRAGÁN
¡Hola a todos! Tras el último Gran Premio del Mundial, disputado en Lierop, todavía faltaba bastante para mi siguiente carrera de cross, que será el Motocross de Las Naciones, en Alemania. Por eso decidí participar en el Nacional de Enduro, gracias a la oportunidad que brindó KTM España. En realidad, el tema surgió por iniciativa mía a principios de temporada, ya que tenía en mente correr la Baja Aragón, por diversión y porque la fecha no coincidía con ninguna prueba de cross. Eso no fue posible, aunque a raíz de aquello Cesar Rojo, de KTM, me propuso probar enduro, y tras meditarlo, acepté, porque sentía curiosidad por saber cómo es una prueba de enduro a ese nivel. Estuve un par de semanas en Barcelona entrenándome con la ayuda de algunos amigos endureros como Joan Pedrero, los hermanos Guerrero, Mario Román y otros. Ya en la carrera, con una EXC 450, las cosas me salieron bastante bien, aun con los típicos errores de novato en una disciplina; como el llevar suspensiones de cross, depósito de enduro con capacidad de sobra, utilizar mousses nuevos, o no jugar con la elección del neumático adecuado. Me sentí nervioso durante la primera vuelta, pues además la crono era sobre hierba, una superficie que no piso con una moto desde… ¡creo que desde nunca! En la segunda y tercera pasadas ya me encontré bastante mejor y me salieron unos buenos tiempos, gracias también a la gran ayuda que me brindó Nani Roma, quien además se ofreció a ser mi mochilero y le estoy muy agradecido.
Posiblemente salga en las dos carreras que quedan del Nacional de Enduro, aunque quiero aclarar que eso no implica que definitivamente deje el cross. Tengo ofertas para competir en ambas especialidades, pero por ahora quiero centrarme en acabar, como «crossero», la temporada 2013, en la que aun me esperan grandes compromisos como el Motocross de Las Naciones, la última del certamen británico y el Red Bull Give Me Five. Tras ellos, pensaré qué hago finalmente para el próximo año.
Respecto al Give Me Five, he estado en el Circuito de Valdemorrillo, Madrid, y me quedé alucinado por lo bien que ha quedado; ¡sencillamente espectacular! Tanto el trazado para la carrera, como las otras tres pistas para que rueden los aficionados. Os espero allí a todos.