MI NUEVA MOTO

Cuando cambiamos nuestra moto, sea por una nueva o de segunda mano, normalmente hemos hecho una serie de valoraciones anteriores a adquirirla en función de si me gusta, si se adapta a lo que yo quiero, si me la recomienda un compañero, si es el último modelo… Pero una vez que la tengamos, si no he podido probarla en profundidad, independientemente de cuál haya sido la valoración anterior, nos podemos encontrar que quizás no se adapte exactamente a nuestras necesidades de uso o en el mejor de los casos simplemente sea perfecta para nosotros y nuestro uso.

A partir de ahí entra en juego algo muy recomendable que te permitirá que tu moto sea única; la personalización.

Cuando hablamos de personalizar nuestra moto hemos de tener en cuenta varios factores siguiendo este orden para un uso y disfrute no profesional: 1. La seguridad: en todo momento las modificaciones que introduzca han de ser seguras mecánicamente hablando. Nunca hemos de menospreciar el riesgo que conlleva utilizar un componente o hacer una modificación que no sea segura mecánicamente. Cualquier menosprecio al ámbito de seguridad se puede pagar caro. Sea en tu moto nueva o usada. En una moto nueva obviamente todos sus componentes están en perfecto estado, en una moto de segunda mano hemos de verificarlos. Los tres elementos básicos a verificar son neumáticos, frenos y suspensiones. 2. La dinámica: una vez que nos aseguramos que todos los componentes de nuestra moto son seguros y están mantenidos perfectamente, hemos de hacer unas valoraciones dinámicas. Realizar varias salidas con nuestra moto para asegurarnos que hacemos una valoración correcta de las modificaciones que queremos introducir, en lugares diferentes y siendo lo más metódicos posibles a la hora de hacer las pruebas. Si el comportamiento no es el adecuado a nivel dinámico hemos de asegurarnos que los neumáticos y sus presiones son correctos, que las suspensiones están bien mantenidas y reguladas y si a nivel ergonómico estoy posicionado correctamente en la moto. Todas estas valoraciones teniendo en cuenta las recomendaciones del fabricante ya sea nueva o usada. 3. El confort: una vez hecha la verificación dinámica e introducida alguna modificación en los puntos anteriores, hay algo que no hemos de menos preciar es el confort. Para un piloto profesional este punto sería el último, pero para un piloto amateur donde el nivel de entreno y resistencia es inferior, si la moto es lo más confortable posible nos ayudará a alargar nuestro disfrute. No hemos de convertir nuestra moto en el sofá de casa, pero sí nos ha de ayudar a disfrutar de un modo seguro de nuestra moto a nivel dinámico. En este punto es importantísimo la personalización de nuestras suspensiones y la adecuación de nuestra posición ergonómica encima de la moto. 4. Las prestaciones: una vez que hemos valorado los tres puntos anteriores, sin perjudicarlos en exceso, hemos de intentar que nuestro vehículo se convierta y nos ayude a conseguir las mejores prestaciones posibles. Esto nos hará acabar de sentirnos un único conjunto motopiloto a nivel dinámico, seguro y confortable. Los neumáticos, frenos, suspensiones, ergonomía, geometría y motor son importantes en este ámbito. Es decir, todo.

Los puntos aquí mencionados son consideraciones a hacer antes de introducir excesivas modificaciones en nuestra moto con el consiguiente mal gasto de tiempo y de dinero. Juan Martínez