Motor Clásico

LO INTERNACIO­NAL

-

Estamos en plena temporada de salones europeos del sector del coche clásico. Yo no puedo ir a tantos como querría, pero afortunada­mente siempre hay algún amigo que va a tal o cual salón y me envía algunas fotos. Una de las cosas que más me han sorprendid­o últimament­e fue la presencia del primigenio La Cuadra con matrícula SO-2 en el Salón de Avignon (Francia), celebrado a finales del mes de marzo. Este vehículo, el de producción española más antiguo que se conserva, lleva varios años bien guardado y apartado de las miradas del público general, a pesar de que sus propietari­os son la familia Mateu de Barcelona, descendien­tes de los fundadores de La Hispano-Suiza. Hacía años que no veíamos este cochecito en eventos en nuestro país y… ¡sorpresa!: aparece en la vecina Francia. Y no estaba sólo. El Club Hispano-Suiza había montado en el Salón de Avignon una impresiona­nte exposición con una decena de modelos de la marca de la cigüeña, entre los que se encontraba­n al menos cuatro unidades procedente­s de España, incluido el citado La Cuadra.

Cabría preguntars­e cuánto hace que no vemos una exposición dedicada a nuestra más gloriosa marca en un salón español, entre otras cosas. Pero es que, además, no ha sido la única en el extranjero con esta temática. Resulta que el evento de Avignon coincidía con el salón Retro Classics de Stuttgart, celebrado el mismo fin de semana, y el Club Hispano Suiza también desplazó a este último una cuidada selección de cuatro bonitos coches de la marca. Total, que un club con base francesa ha llevado coches de marca hispanofra­ncesa a un salón alemán, pero también ha conseguido llevar a Francia varias unidades que residen en España. Y esto no es todo; resulta que semejante despliegue ha tenido lugar mientras se celebraba una tercera feria, ¡y menuda feria!, la famosa Techno Classica de Essen, también en Alemania, que coincidía este año con Avignon y con Stuttgart.

Parece que en España no es el único lugar donde hay una lucha abierta entre organizado­res de ferias de clásicos, y en esto es en lo único que se parecen nuestros salones a los del resto de Europa. Porque aquí se nos hincha mucho el pecho con lo de los «salones internacio­nales», pero lo cierto es que nuestras ferias no dejan de ser eventos locales de tamaño medio. No suele haber compra-ventas, ni mucho menos clubes extranjero­s. Si acaso algún recambista, y no hablemos del visitante foráneo. No está ni se le espera, y si se le ve es en las ferias que se celebran donde hay colonia extranjera residente en nuestro país. Así que por ahora, al aficionado español medio no le queda otra que viajar… incluso para ver coches que en realidad los tenemos aquí, al lado de casa.

Francisco Carrión

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain