ATACAN A AL BARÇA
El Comité de Competición sancionó ayer al Valencia con 1.500 euros de multa y apercibimiento de cierre de Mestalla por el botellazo a Neymar en el tramo final del partido del pasado sábado ante el Barça. Hasta ahí, todo normal. Sin embargo, la sorpresa saltó porque el citado comité no se contentó solo con sancionar económicamente al club ‘che’ sino que aprovechó en su fallo para cargar duramente contra algunos jugadores del Barça por su actitud en Mestalla. En los fundamentos jurídicos de su resolución, Competición deja en mal lugar a los futbolistas azulgrana, a quienes afea su conducta pese a haber sido las víctimas de todo tipo de insultos y, lo que es más grave, del lanzamiento de diversos objetos, uno de ellos la botella de agua que impactó en Neymar y Suárez.
Competición afirma que “sin que nada justifique o ampare la in- decorosa reacción de una serie de energúmenos, no debe pasarse por alto el reprochable comportamiento que muestran algunos jugadores del FC Barcelona al dirigirse con ciertos gestos y expresiones hacia el público durante la celebración del gol que acababan de anotar”.
En este sentido, añade Competición que “tampoco constituye precisamente un ejemplo de deportividad la exagerada reacción de algunos jugadores que, sin haberles llegado a alcanzar ninguna botella, simulan o fingen de forma simultánea haber sido golpeados igualmente por un objeto mucho más contundente que la botella que alcanza a uno solo de ellos”.
Es en el tramo final de su resolución el Comité agrega que el botellazo no está justificado ni tiene atenuantes, pero de paso vuelve a cargar contra “algunos futbolistas del Barça” a los que acusa de tener “un comportamiento poco ejem- plar” que “les descalifica y ridiculiza por sí solos”. Al menos, eso sí, concluye asegurando que “insistimos en que nada, absolutamente nada, justifica una reacción violenta por parte del público”.
El precedente de Piqué
No es la primera vez que Francisco Rubio, presidente de Competición, provoca la indignación del FC Barcelona por sus comentarios en una resolución. Hace poco más de un año, tras la expulsión de Gerard Piqué por insultar a Velasco Carballo, en la vuelta de la Supercopa de España-2015 ante el Athletic, se dejó ir como Juez Único con alguna coletilla irónica: “Por más que el Barcelona trate de negar la evidencia con endebles argumentos, no deja de ser una grosería como la puta madre en su traducción del catalán, (la puta mare), tales alegaciones no pasan de ser una cortina de humo ante un meridiano insulto”. Rubio aleccionó al
Competición multó al Valencia con 1.500 euros y apercibimiento de cierre pero criticó la actitud de los jugadores culés El fallo habla de su “reprochable comportamiento” al dirigirse al público durante la celebración del gol que supuso el 2-3 También de “exagerada reacción” tras el botellazo dado que “simulan o fingen” haber sido golpeados a la vez Y remata hablando de un “comportamiento poco ejemplar” que les descalifica y ridiculiza por sí solos” Este duro ataque desde el Comité, que depende de la Federación, se suma a las duras críticas de Tebas, jefe de LaLiga Todo ello se une a las duras críticas a Piqué con la Roja y al duro marcaje de Hacienda a Messi, Neymar, al club y a otros cracks
Barça señalando que debería haber alegado ante el Juez Único (que es él) y no ante Competición dado que la Supercopa de España “es una competición cuya competencia disciplinaria queda al margen del referido Comité”.
Por tierra, mar y aire
El ataque de Competición se suma a las críticas de Tebas a los jugadores del Barça tras los incidentes de Mestalla. La plantilla azulgrana, además, está sufriendo una fuerte presión mediática desde Madrid, como por ejemplo Piqué con el episodio del corte de las mangas de la camiseta de la selección. A todo esto, Hacienda se está mostrando implacable con Messi y Neymar, algo que los jugadores entienden como un claro acoso. En resumen, un cóctel explosivo en que, unido a la tensión que genera lejos del Camp Nou, el escenario político catalán tiene al Barça en el disparadero