Latre saca de quicio al Barça
No tenía buenas referencias el Barça de Santiago Jaime Latre desde los partidos de la temporada pasada contra el Málaga y el propio Sevilla en el Camp Nou. Se acordaban Leo Messi y compañía de haberles birlado dos penaltis en el primer encuentro y uno en el segundo. Y el aragonés volvió a encender los ánimos de los jugadores azulgrana, que, además de revolverse ante la adversidad con un arrebato futbolístico en la segunda mitad, debieron lidiar con el particular criterio del colegiado.
Este llegó a sacar de sus casillas a Leo Messi en plena exhibición después de ser él a quien Steven N’Zonzi le había sacado literalmente la bota en el minuto 82 tras frenar como pudo un contragolpe liderado por el argentino. Jaime Latre metió prisa al genio del Barça para que se calzara la bota, grabada con el nombre de su hijo Thiago y la fecha de su nacimiento (el jueves cumplió cuatro años). Fue la espoleta que provocó la airada protesta de un Messi alucinado. De golpeado a reprendido. Según reflejó en el acta el trencilla, Leo quiso “retrasar la salida del terreno de juego para poner en orden su equipamiento, con ánimo de perder tiempo”. Su asombro, compartido con su banquillo, derivó en rabia hasta el punto de estrellar su bota contra el césped. Tuvo que marcharse a la banda a calzarse.
Jaime Latre, que acabó sacando seis tarjetas a los culés y cuatro a los locales, ya había exasperado al Barça con su distinto rasero en el primer tiempo. Sancionó con amarilla una falta a Neymar en el minuto 10 pero una de Sarabia, quizá más dura, no recibió la amonestación del oscense, que también pasó por alto la segunda cartulina a Rami en el minuto 54. El central sevillista acabó sobre el césped gracias a Jaime Latre. Tras ver la primera por una falta a Neymar en el 24’, le perdonó la consiguiente expulsión al haber derribado claramente a Sergio Busquets.
Suárez se asegura el Clásico
Quien sí buscó la amarilla y se salió con la suya fue Luis Suárez. El uruguayo se perderá el partido de la próxima jornada que el Barça jugará el sábado 19 de noviembre en el Camp Nou contra el Málaga al provocar en el minuto 89 la quinta amarilla en lo que va de Liga cuando protestó ostensiblemente una falta de Carriço. De esta forma, estará liberado para jugar contra la Real Sociedad en Anoeta y ante el Real Madrid en Barcelona y podrá descansar de paso tras haber disputado dos partidos con Uruguay. Será una oportunidad para Paco Alcácer.
Neymar, en peligro
Quien está ahora amenazado es Neymar, que suma cuatro amarillas en el Campeonato y podría perderse el partido de Donostia si ve otra ante el Málaga o causar baja en el Clásico si es amonestado ante la Real Sociedad