Los bomberos se vuelcan con Dídac
Costa ya tiene listo el barco; el Cuerpo de Les Sables ha ofrecido estos 3 días toda la intendencia
Didac Costa y su equipo de tierra han estado trabajando a contrarreloj desde la tarde del domingo cuando una rotura le obligó a volver a Les Sables d’Olonne, punto de partida de la Vendée Globe o vuelta al mundo en solitario y sin escalas. Tres días después de trabajar sin parar, el One One Planet One Ocean está a punto para volver a zarpar. Ahora sólo resta esperar que las condiciones meteorológicas que hay en el Golfo de Vizcaya, con vientos de 30-35 nudos y olas de hasta cinco metros, sean más favorables para evitar sufrir nuevos problemas.
Pero durante estos días intensos de trabajo de Costa y su equipo, además de la solidaridad del resto de equipos participantes, se han encontrado con la agradable sorpresa de ver como la población de Les Sables se ha volcado con ellos y les ha ayudado en todo lo posible logística y humanamente hablando. Un detalle bonito ha sido el de los bomberos –oficio de Didac en Catalunya- de Les Sables, que les han mimado al máximo llevándoles todos los días la intendencia: desayuno, comida y cena, sabedores que estaban trabajando sin parar dentro del barco arreglando la avería para poder volver a retomar la salida.
Costa ha destacado que “hubiera sido imposible lograrlo en estos plazos sin la ayuda y solidaridad de otros equipos de la regata y especialmente del cuerpo de bomberos de Les Sables d’Olonne, que se ha volcado en ayudarnos”.
A primera hora de la madrugada de ayer miércoles, 56 horas después de que Costa volviera a puerto con importantes daños en los sistemas eléctricos y mecánicos de a bordo, el equipo de tierra logró reponer y validar todas las piezas averiadas. Tras la inundación del compartimento motor y de baterías a causa de la rotura de uno de los tubos de vaciado de los tanques de lastre, y en vista de los plazos para disponer de determinadas piezas, el equipo optó por modificar el sistema de carga.
“Hemos sustituido la generatriz por un segundo alternador”, explica Costa, “esto implicará cargar más a menudo y llevar algo más de combustible del inicialmente previsto”. Ahora sólo resta contar las horas que faltan para que Didac vuelva a partir, sin el calor de los miles de aficionados del domingo, pero sí con el apoyo recibido por todo el mundo para que en breve ponga rumbo a Canarias.
El viento debería ir amainando progresivamente en las próximas horas y el equipo deberá esperar además una marea propicia para cruzar de nuevo el canal de PortOlonna y volver a cruzar la línea de salida hoy