El bucle de adoración a Cristiano
Los vídeos para calentar la campaña del Balón de Oro resultan muy ridículos
Entramos en una de las etapas del año más fatídicas de la información deportiva. De noviembre a enero nos vemos inmersos en el estúpido y vacío bucle sobre si Messi o Cristiano deben ganar el Balón de Oro. Y no sólo porque, como hámsteres en la rueda de una jaula, los reporteros no paran de preguntar, incluso a las piedras, quién debe ganarlo. También porque juzgan cada respuesta, la ponen en duda, y, en caso de no satisfacer las expectativas, la califican de insolencia o agravio.
Además tenemos que tragarnos, mediodía sí, noche también, vídeos insoportables relatando sus más absurdas virtudes y cifras para remar a favor. El miércoles en Deportes Cuatro uno de estos vídeos confundía al espectador entre talento deportivo y publicidad de una manera ridícula. Se trataba de informar que Cristiano era el deportista mejor pagado por una marca deportiva. A ritmo de la cancioncita ‘Money makes the world go round’ (súper originales) nos aseguraban que Nike ve en Cristiano “algo similar a lo que Michael Jordan supuso para toda una generación a finales de los años 90: un icono”. El término “algo similar” es lo que da más risa en la frase. Una manera de vender la moto para equiparar Cristiano a Jordan aunque, ejem, no del todo. Y lo demostraban con la siguiente prueba definitiva: “De hecho, en el anuncio del acuerdo Nike muestra en Internet todas y cada una de las botas que ha llevado CR7 en momentos claves de su carrera. Lo dicho: Un icono”. ¿En serio? ¿Te convierte eso automáticamente en sucesor de Jordan? Y la información seguía: “Por si fuera poco Nike lo considera el deportista más famoso del mundo delante de LeBron, Messi, Neymar y Roger Federer”. Aquí se trata de confundir al espectador entre un interés publicitario y una estrategia de marketing con una información deportiva. Nike vende un submarino y el informativo lo compra. Y termina: “El nuevo contrato supera las cifras de la mayoría de las estrellas de la NBA”. O sea, “la mayoría”. Es decir, no todas. Tiene otras delante, pero bueno. Se trata de promocionarle y confundir la estrategia comercial de Nike en una supuesta información de rigor para el espectador