Clubs De futbolistas

SE HA PUESTO DE MODA propagar que los clubs de fútbol deben ser dirigidos por futbolistas. Está bien. Muy bien. Sobre todo si los jugadores de fútbol elegidos para gestionar sirven. Si no, por el mero hecho de haberse cambiado en un vestuario no se alcanza el cargo de dirigente. Tampoco ahora los no futbolistas tienen más mérito que haberse presentado a unas elecciones y haberlas ganado. Algunos de ellos son empresarios de éxito y han demostrado capacidad de gestión, pero la popularidad que atesoran los jugadores es inigualable.

PIQUÉ REÚNE SEGURO las condiciones idóneas para presidir el Barça. Y la primera dama supera todas las previsiones imaginables en el mundo global. Y será bueno que en su día el central explique su concepto de club y las líneas verdes y rojas. En el Athletic de Bilbao hay un buen presidente y había sido futbolista, Josu Urrutia. Gamper también lo fue, pero en aquella época lo eran casi todos (Wild, Terradas y Witty también lo fueron) Piqué además, en contra de lo que piensan la mayoría de jugadores, no quiere ser entrenador. Apunta más alto, tiene ganas, vocación y está preparado. De momento sería bueno, sin embargo, que concentrara, como lo hace, sus mejores esfuerzos en ser uno de los mejores centrales del mundo, que ya lo es. Ese es el mejor servicio que puede hacerle hoy al Barça.

DESPUÉS, TODO SE ANDARÁ. No hace falta que le hagan la campaña ahora. Ni que el club de los futbolistas sea todo de jugadores, a lo mejor es necesario algún director financiero experto en finanzas, o en comunicación, esa área tan difícil y cada vez más lejana entre medios y vestuario, pero en cambio tan cercana con las redes sociales o un Periscope a mano. Queda tiempo. Piqué es un buen candidato para presidente aunque no lograra convencer a sus compañeros en las elecciones a capitán. Prefirieron a Mascherano. Otro gran candidato, sin duda, sería Messi. Manda y con talento