Monje Susana
E l fin de semana nos ha sorprendido con la inesperada renuncia de Susana Monje como miembro del consejo directivo del FC Barcelona. Bartomeu pierde a uno de sus mayores bastiones, puesto que se trataba de la vicepresidenta económica, con una gran influencia en la toma de decisiones de la actual junta, que ha hecho del control del gasto financiero una de sus señas de identidad. El papel de Monje fue clave para que no se superasen los ratios del EBITDA, que se veían amenazados la temporada pasada por el posible fichaje de Nolito en el último mercado de invierno.
Tenía por delante un largo recorrido como directiva y a pesar de que el vicepresidente primero
Jordi Cardoner parece mejor situado como posible candidato continuista, Monje reunía todos los requisitos para llegar a convertirse en la primera mujer presidenta del Barça. Según la versión oficial la imposibilidad de hacer compatible las obligaciones del cargo con su vida familiar y especialmente profesional, como presidenta de un entramado empresarial del sector de la construcción de grandes infraestructuras, han sido los motivos que llevado a tan sentida renuncia, que deja al actual consejo con una sola mujer en la persona de Anna Maria Teixidor. De momento no es intención de
Bartomeu cubrir la vacante con el nombramiento de un nuevo directivo, puesto que se confía en la capacidad de gestión del flamante CEO Oscar Grau, confirmándose así la intención de conceder a los ejecutivos el máximo protagonismo en la gestión del club, quedando los directivos en un segundo plano, más de control y de representación que de toma de decisiones. Es lo que exigen los nuevos tiempos