EL MEJOR COSTA, TRAS UN PARÓN
El Atlético quiere que se quede en el equipo los cuatro meses hasta que la sanción expire Su segunda mejor racha goleadora llegó tras la grave lesión que le dejó seis meses sin jugar
Diego Costa es la gran petición de Diego Pablo Simeone, junto a la de Vitolo. En un principio, la opción más probable para el delantero colchonero era la de que jugase los primeros meses cedido en algún club. Así lo sugirió él mismo en su estancia con la selección española: “Fichar por el Atlético no significa estar sin jugar, puedo ir a algún equipo en España, Italia, Brasil, donde sea… ¡Cómo no (le va a encantar jugar al Atlético)! Es un equipo al que le tengo mucho cariño. Independientemente de si ficho o no voy a seguir queriendo al Atlético”.
Sin embargo, en el club colchonero entienden que lo mejor para todas las partes sería que el futbolista estuviese los primeros cuatro meses de competición en el propio equipo rojiblanco, a las órdenes de Simeone. Una forma de tenerle más controlado, de cerca, de evitar que tenga que ‘hacer’ una nueva vida en el club que sea, con nueva ciudad, etc para tener que luego regresar al club colchonero y ser inscrito en enero. Entienden en la entidad rojiblanca que Brasil no es una opción y otro club español sería complicado.
El jugador está por la labor de recalar en el Atlético aunque eso suponga un sacrificio que para él puede ser clave porque se está jugando su presencia en el Mundial de Rusia.
En el club colchonero recuerdan que Diego Costa ya pasó por un trance similar de tan sólo tener que entrenarse durante medio año, sin poder jugar. Claro está que fueron otras circunstancias pero también es cierto que fue muy disciplinado y le ayudó a cre- cer. De hecho, el mayor crecimiento del jugador se produjo precisamente tras ese ‘impasse’.
Hablamos de la temporada 1112, cuando todo cambió para él. El jugador estaba traspasado al Besiktas pero la tarde antes de que todo se firmase se lesionó de gravedad -rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco interno de la rodilla derecha-. El equipo turco renunció a él y se quedó en el Atlético, entrenándose y recuperándose durante seis meses. Le tocó vivir desde la barrera el impacto de la destitución de Gregorio Manzano y la llegada de Simeone. El hispano-brasileño no llegó a entrenarse entonces como uno más, aunque sí paralelamente en ese campo en el que el Cholo daba sus primeras instrucciones. Él casi entiende que fue un designio divino.
La mejor solución
El caso es que esos seis meses recuperándose y entrenándose al margen, fueron para él un trampolín. Regresó como un tiro. El Atlético tuvo que cederlo porque tenía las plazas de extracomunitarios ocupadas. Llegó al Rayo Vallecano donde ni siquiera pudo participar en el primer partido tras su fichaje porque aunque ya contaba con el alta médica, aún no estaba físicamente a tono. En total disputó 16 partidos en los que marcó 10 goles y dio cuatro asistencias. Un rendimiento que le permitió volver al Atlético y convencer a Simeone. Sólo con el Cholo, en la temporada 13/14, Costa logró un ratio tan alto de goles/partidos como lo hizo tras estar parado seis meses. En su curso en el Rayo firmó 0,63 goles por partido y en la campaña del título de LaLiga de 0,69, los dos promedios más altos de su carrera. En esta ocasión ni siquiera tendría que estar ‘parado’ en el club rojiblanco sino que estaría entrenándose como uno más esos primeros cuatro meses hasta que pueda ser inscrito. A ojos del Atlético todo son ventajas