Ferrer gana un título casi dos años después
“Si soy así de competitivo, jugaré en 2018”, dice
David Ferrer ve el cielo más despejado tras acabar ayer con una sequía de casi dos años sin títulos. El alicantino, ex nº 3 mundial y ahora 46º del ranking, ganó por un doble 6-4 al ucraniano Alexandr Dolgopolov (89º) en la final del WTA sobre tierra de Bastad, su 27º trofeo y primero desde que conquistó Viena en octubre de 2015. ‘Ferru’ está viviendo una temporada de incertidumbre tras un largo tiempo lastrado por una lesión en el tendón de Aquiles de la pierna derecha, pero este éxito a sus 35 años le despeja al menos algunas dudas, tal como reconoció ayer en rueda de prensa.
“Hacía dos años que no ganaba un torneo, así que estoy muy contento por esta victoria. Voy semana a semana, partido a partido y todavía tengo motivación. Sé que será difícil volver al top-10, pero si me mantengo competitivo como esta semana jugaré el próximo año seguro. Aún disfruto jugando a tenis, pero es diferente con 35 años”, afirmó Ferrer.
David es el tenista en activo con más títulos (27) tras el ‘Big Four’ formado por Federer (93), Nadal (73), Djokovic (68) y Murray (45). Un único Masters 1.000 (París Bercy’2012) lustra su palmarés tras 52 finales jugadas, perdidas las dos más importantes en Roland Garros’2013 (ante Nadal) y el Masters’2007 (Federer).
Es su tercer título en Bastad, uno cada cinco años (2007, 2012, 2017), con lo que iguala a Borg y Wilander y se queda a uno del récord de Gustafsson (4) en la era Open. David ganó ayer a Dolgopolov por 10ª vez en 14 partidos y hoy dará un salto de 13 puestos en el ranking mundial, hasta el nº 33. Con 35 años aún le queda cuerda