LA VIDA SIGUE OBLAK
El meta le dio el triunfo al Atleti ante el Nápoles con recital de paradas, incluido un penalti Callejón adelantó al Nápoles y el Atleti remontó con goles de Torres y Vietto y jugará la final
El Atlético de Madrid no se rinde nunca. De lo mismo la época del año que sea, el calor que haga, el rival que esté enfrente o que acabe con uno menos...Simeone le ha inculcado a este equipo un espíritu ganador envidiable para cualquier equipo del mundo. Eso lo pudo comprobar el Nápoles en Munich en la semifinal de la Audi Cup. Los italianos llegaron con más minutos de partidos en sus piernas, más rodados, pero no pudieron con un Atleti al que es cierto al que en ocasiones se le notó esa falta de partidos, pero que lo suplió con su alma, con su calidad para remontar el partido y acabar plantándose en la final de la Audi Cup.
Alma, espíritu ganador y Oblak en la portería. El esloveno sigue la estela de la temporada pasada. O sea, impresionante parándolo absolutamente todo y lo cierto es que tuvo trabajo de sobra. Lo paró todo, empezando por un penalti en el minuto 34 a Milik que Savic cometió sobre Callejón. Fue la primera ocasión peligrosa para el Nápoles pero no la del partido. Esa fue para Griezmann que en el minuto 24 conectó un cabezazo impresionante al que respondió Reina con una acción espectacular. A partir de ese remate, el partido se revitalizó porque antes, era un querer y no poder del Nápoles con el balón ante un Atlético esperando el error para salir a la contra. El remate de Griezmann y la parada de Reina despertó un partido que en esos últimos 20 minutos fue más rápido, con ocasiones en ambas porterías con Oblak y Reina como protagonistas. Gracias a ellos se llegó al descanso sin goles y en la reanudación, el encuentro volvió a decaer, con el Atlético más cómodo en el césped. Un escenario que cambió en el minuto 56 con el gol de Callejón que significaba el 0-1 para el Nápoles. Ese gol dejó tocado al Atlético que tuvo en Oblak a su salvador evitando un par de goles italianos.
Remontada y a la final
En ese instante, cuando todo parecía perdido para el Atlético, apareció su espíritu ganador para darle la vuelta al partido. Empató Torres en el minuto 72 a centro de Griezmann con un remate no muy ortodoxo pero sí efectivo ante el que nada pudo hacer Reina. Ese 1-1 le dio gasolina al Atleti que se fue a por la victoria ante un Nápoles que no se esperaba ese gol y menos el de Vietto en el minuto 80 a las salida de un saque de esquina.
Era el 2-1 que parecía impensable pocos minutos antes pero este Atlético volvió a demostrar que la palabra derrota no está en su diccionario. El Nápoles apretó hasta el final buscando el empate, pero el Atlético no se desordenó ante el ataque del equipo italiano que tampoco pudo aprovechar la roja a Godín en el minuto 89 de partido. El colofón de la victoria rojiblanca lo puso, como no podía ser de otra manera, Oblak, el protagonista rojiblanco del encuentro. El meta evitó el empate del Nápoles parando un cabezazo de Koulibaly que recibió la ovación de la grada. No era para menos. Oblak lo había hecho todo bien y arriba, Torres y Vietto mostraron que este Atleti también tiene ‘nueves’