España cierra el Mundial con plata en K4 500
Marcus Cooper, Cristian Toro, Carlos Garrote y Rodrigo Germade prolongaron su paso triunfal por los mundiales de piragüismo de Racice (República Checa) con una segunda plaza en la final de K4 500, superados solo por la embarcación alemana. Los germanos, liderados por el campeón olímpico y mundial Max Rendschmidt, cubrieron la primera mitad de la distancia por detrás de los españoles, pero estos cedieron toda la ventaja al final (sextos en los últimos 250 metros) y sufrieron para hacerse con la plata ante el empuje del bote checo. Al final, 1:17.734 para Alemania, 1:18.371 para España y 1:18.729 para República Checa. Era la tercera medalla para la delegación española en Racice y la segunda para Cooper, tras el oro en K2 500 y la plata en K2 200, ambas el sábado.
“Es una pasada lo que hemos hecho, un regatón”, explicó Cooper, campeón olímpico en K1 1000 m. el año pasado. “Subcampeones del mundo es algo muy grande, a ver si la temporada que viene estamos todavía más encima, y al final el objetivo más grande es Tokio 2020. Hay que seguir trabajando, nos vamos muy contentos todos”.
Antes de que el K4 500 se hiciera con el subcampeonato mundial, el K4 1.000 formado por Javier Hernanz, Javier Cabañín, Óscar Carrera y Rubén Millán terminó cuarto en su final, apenas a 930 milésimas del podio. La victoria en la prueba fue para el equipo australiano. También a un paso del podio se quedó Roi Rodríguez en el K1 500. No pudo con la velocidad que impuso el checo Josef Dostál, ganador con 1:36.520. En C2 200 Antoni Segura y Alfonso Benavides cubrieron la distancia en la quinta posición. Laia Pelachs acabó sexta en la final de K1 1.000, y octava fue la embarcación española femenina de K4 500, ocupada por Sara Ouzande, Alicia Heredia, Isabel Contreras y Begoña Lazkano. Novena y última entró en meta Adriana Paniagua en el C1 200 (49.457)