Insolaciones estivales
Parece que el sol ha tostado este verano no solo la piel sino también las neuronas de algunos, hasta fundirlas, si nos atenemos a los episodios protagonizados por personajes, sin conexión alguna entre ellos, pero unidos por una especie de concurso de disparates. Ostenta el dudoso honor de liderar ese concurso Florentino Pérez, presidente y director técnico de un club que ha forjado su historia a base de regalos arbitrales y que ha decidido emprender una cruzada contra ellos (los árbitros, se entiende). Pero, claro, a las primeras de cambio, ¡zas! Un puntito regalado (el primero de esta Liga) en el gol de Lucas previa falta de Ramos, ante el Levante. Y es que la cabra siempre tira al monte. Se queja, sí, cuando le han ayudado a no perder más puntos y... tras haber traspasado tres arietes en dos años (Jesé, Morata y Mariano) y quedarse con el más torpe y silbado en el Bernabéu (Benzema). El hombre, aún bajo los efectos de la insolación, ha pedido incluso el uso del VAR en el fútbol español. Vamos, algo así como pedir el final definitivo de su club. ¡Qué listo!
Le siguen a Florentino los letrados que se ensañaron con Messi por su deuda con Hacienda, que es casi cuatro veces inferior a la de Cristiano. Sí, porque en el caso de éste parece que la estrategia es la de empurar a los asesores y minimizar la culpa del jugador. ¿Por qué no se hizo así con los asesores de Messi? Porque es del Barça, claro. Prepárense para otro episodio (ya no viene de uno) que demostrará que la justicia no es aquí igual para todos, en especial si el Real está de por medio. Fíjense que cuando Cristiano fue a declarar incluso le permitieron entrar en el juzgado por el parking para evitarle las fotos. Una burla a la igualdad ante la ley.
El siguiente insolado es Agustí Benedito, que reclama que los sábados no deben considerarse días hábiles en el voto de censura que ha instado. ¡Hombre! ¿Y qué hacían el sábado las cuatro carpas que instaló en el Camp Nou para recoger adhesiones? Benedito ,o se pasa de listo o toma por tontos a los barcelonistas