EN BAKÚ PARA UNA FINAL
El Atlético llegó a la capital azerí tras seis horas de viaje para jugar un partido decisivo El conjunto rojiblanco no puede fallar ante el Qarabag para seguir vivo en Champions
CONDICIONADO El empate en Roma y la derrota ante el Chelsea ‘obligan’
SEIS PUNTOS Es el objetivo del Atlético en el doble duelo ante los azeríes
CLIMA Lluvia a la llegada, pero sin ella para el encuentro
El Atlético de Madrid ya está en Bakú. Un día antes de lo habitual en desplazamientos de Champions, el conjunto rojiblanco llegó a su destino. Alrededor de las diez de la noche (ocho en España), y tras seis horas de viaje, la expedición colchonera aterrizó en la capital azerí con el tiempo justo de poner rumbo a su hotel de concentración, cenar y dormir.
Tiempo para descansar necesario tras un largo viaje (despegaron a las dos de la tarde) y recuperar fuerzas, el Atlético entrenará esta tarde en el Olímpico de Bákú. Un estadio que ya visitaron en 2013 y en el que tratarán de firmar un resultado similar al de aquel encuentro amistoso, que se resolvió con un 0-3 ante un combinado de estrellas de Azerbaiyán.
Ganar es vital para el Atlético. No se puede permitir un tropiezo el conjunto colchonero para no ver comprometida y de forma muy seria su clasificación para los octavos de final de la Champions League. Porque el empate en Roma y la derrota frente al Chelsea en el Metropolitano en el último segundo del partido ha lastrado las opciones del cuadro rojiblanco. Pero siguen existiendo, aunque pasan por ganar al Qarabag.
Derrotar al equipo azerí, la cenicienta del grupo que se ha estrenado este curso en la máxima competición continental, tanto en Bakú como en Madrid, es fundamental. Por ahí pasan las cuentas del Atlético, muy favorito para la cita de mañana por la tarde y que tiene prohibido fallar.
El Chelsea suma seis puntos, la Roma cuatro y el Atlético uno. Sumar los seis en este doble duelo y aprovechar el que tendrá lugar entre los equipos de las capitales italiana y británica volvería a dejar a los de Diego Simeone en una buena situación, dependiendo de ellos mismos antes de recibir a la Roma en el Metropolitano, lo que convertirá ese duelo en otra final entre ambos conjuntos. La tercera consecutiva para el Atlético.Y puede que no sea la última, pues en la última jornada, deberá visitar Stamford Bridge, quién sabe si ya con el Chelsea, que ha empezado con velocidad de crucero, en la siguiente fase.
Lluvia, pero sin frío
Bakú recibió al Atlético con lluvia, que seguirá cayendo durante toda la jornada de hoy, pero que remitirá y mañana, día de partido, no hará acto de presencia según las previsiones climatológicas.
En cuanto a la temperatura, la máxima en los dos días que pasarán los rojiblancos en Bakú es de 18 grados, y la mínima de 12. Un clima agradable teniendo en cuenta que Azerbaiyán. Nada que ver con el clima que el Atlético se hubiese encontrado en pleno invierno, cuando la temperatura media es de cuatro grados, aunque tampoco tiene nada que ver con la de Rusia o Ucrania.
El viento, otro de los protagonistas principales de Bakú a lo largo de todo el año, tampoco tendrá mucha incidencia en la visita del equipo español.
El clima en el estadio tampoco será hostil. La afición azerí estará con su equipo, pero el Olímpico no será una olla a presión para el Atlético... ni para ningún equipo que lo visite en esta Champions League