CRISIS TOTAL
El Real Madrid no sólo no mejoró la imagen que dio en Girona si no que encajó una goleada del Tottenham El equipo blanco mostró en Londres que está en caída libre y no se ven síntomas de reacción inmediata
A este Madrid no le quedan excusas para maquillar una crisis en toda regla
Ni la Champions ni el Tottenham ni Wembley. Este Real Madrid no está para nada ni para nadie. En Londres se vio que la derrota en Girona no fue un accidente, un fallo de concentración puntual, una ausencia de actitud. Lo que pasó en Girona y lo que pasó en Londres es la muestra palpable de que este Real Madrid está en crisis. Nadie decía esa palabra en el madridismo porque en Champions el equipo salvaba los muebles que estropeaba en Liga. Sin embargo, tras la goleada recibida en Wembley ante el Tottenham, a este Madrid ya no le quedan excusas para maquillar no un mal momento, si no una crisis en toda regla.
El equipo blanco volvió a mostrar los mismos síntomas que lleva arrastrando desde hace mucho tiempo. Es un equipo que físicamente no está bien y sin eso, aunque quieras, no puedes. Modric y Kroos son el reflejo de esa falta de forma de este equipo. Casemiro está más o menos igual y sólo queda Isco como el único capaz de generar algo de fútbol. Un argumento que podría servir para algunos partidos, pero no ante rivales como el Tottenham, ya clasificado para la siguiente ronda de la Champions. Pochettino le volvió a dar un repaso táctico a Zidane que repitió el once que perdió en Girona con la novedad de Nacho por el lesionado Varane. Y como en Montilivi, el Madrid no dio la talla. Comenzó bien, pero en cuanto apretaron los ingleses, al Madrid se le vieron todas
las vergüenzas que son muchas. El partido se decantaba para los spurs y se veía que el gol del Tottenham iba a llegar. No tanto por ocasiones, si no por sensaciones, por lo que se veía en el campo
que no era otra cosa que un Madrid endeble, cometiendo muchos fallos y un Tottenham con las ideas muy claras y con Kane siendo la pesadilla blanca a pesar de estar medio lesionado. El equipo de
Londres marcó el 1-0 en el minuto 27. Su autor fue Dele Alli que remató un centro de Trippier que estaba en fuera de juego. El colegiado y sus asistentes no señalaron nada y el 1-0 subió al marcador. Ese tanto hizo reaccionar al Madrid, pero fueron más fuegos artificiales que otra cosa.
La segunda mitad comenzó con un cambio táctico de Zidane que hizo jugar al equipo con tres centrales y poblar el centro del campo. Parecía que le funcionaba, pero los blancos seguían fallando atrás y así llegó el 2-0 de Dele Alli en el minuto 56, que dejó en evidencia a Casemiro y su disparo dio en Ramos, lo que descolocó a Casilla. Un mazazo para un Madrid muy ‘tocado’ que en una contra encajó el 3-0 de Eriksen en el minuto 65. El partido era un baño inglés a un Madrid que reaccionó en los minutos finales con el gol de Cristiano en el minuto 80 y que tuvo más ocasiones para marcar. Fue un lavado de imagen de un Madrid que tiene casi imposible acabar primero de grupo