SOBRESALIENTE
Rafa Nadal bate en tres sets a ‘Yaca’ Mayer, con un recital de 40 golpes ganadores y sólo 10 errores El nº 1 afrontó el duelo como un examen vital, y sacó nota para medirse en tercera ronda a Dzumhur
El triple 6-1 sobre el dominicano Víctor Estrella Burgos sólo había servido de toma de contacto, de entrenamiento en competición. No era referencia válida para un Rafa Nadal deseoso de probarse al no haber podido disputar torneo alguno antes de afrontar el Open de Australia, algo nuevo en su carrera pese a que acude a Melbourne PArk por decimotercera vez.
Avisó que el examen real para calibrar en qué momento se hallaba de tenis se llamaba Leonardo ‘Yaca’ Mayer, 30 años y 52º ATP, un rival a quien ya había batido cuatro veces, pero con quien había perdido el set inicial en el pasado Open USA. “Un rival que saca muy bien, agresivo, una subida de nivel”, analizó Rafa Nadal.
Amante de los retos, acudió al examen centrado, e incluso más preparado de lo que externamente se pudiera prever teniendo en cuenta que sólo era su segundo individual en serio. Nadal obsequió al público de la central con un recital, bien acompañado por un serio Leo Mayer, dominado pero luchando cada punto, intentando tutear al nº 1 con subidas continuas a la red y pegando sus buenos latigazos de derecha.
Nadal se empleó a fondo, y venció por 6-3, 6-4 y 7-6 (7-4), en dos horas y 38 minutos de tenis para paladear. Ritmo intenso, puja continua por tomar la iniciativa del punto, dejar atrás la línea de fondo. El balear se exhibió con 40 golpes ganadores, 22 con la brújula de su esquema, el ‘drive’, y sólo 10 errores no forzados. Si la derecha funciona, dicta, el resto acompaña. La paralela, el ‘bananazo’ marca de la casa del manacorí, provocó no pocos signos de admiración en la grada, e incluso alguna sonrisa de ‘Yaca’ Mayer, incrédulo ante algunos golpes que se antojaban imposibles hasta que Rafa los ejecutó. Sólo un pero en la labor del manacorí, que no sellara el pase con 5-4 y saque en la tercera manga. Acabó sufriendo el ‘break’, único durante la contienda. Aunque ello le permitió afrontar la prueba del ‘tiebreak’, en la que deleitó. Se olvidó del ligero tropiezo previo, y se aplicó en firmar la clasificación para tercera ronda, ante el bosnio Damir Dzumhur, 25 años, 30º ATP y verdugo del australiano John Millman por 7-5, 3-6, 6-4 y 6-1.
Balance favorable a Dzumhur
El de Sarajevo, adversario de Nadal mañana por una plaza en octavos,
es uno de los pocos tenistas que aún pueden alardear de presentar un balance positivo ante el balear, a quien eliminó en Miami 2016, si bien en circunstancias anómalas. Rafa se retiró por un bajón de tensión cuando cedía 2-6, 6-4 y 3-0. “Tuve miedo de desmayarme en la pista”, explicó entonces el campeón del Open de Australia en 2009, el único Grand Slam que sólo ha cazado una vez.
Dzumhur cotiza al alza tras levantar los trofeos de Moscú y San Petersburgo en la recta final de la pasada campaña, pero Nadal enseñó unas credenciales para el optimismo frente a Mayer: “Para mí es una victoria muy importante porque Leo tiene mucho potencial. Era mi primer test en el torneo, y creo que lo he superado bien. Otro triunfo, que es lo importante ahora mismo”
Rafa Nadal “Es una victoria muy importante para mí, Leo es un jugador de mucho potencial”
“He llevado bien un partido importante, lo que me da confianza para lo que viene”
“Tras tanto tiempo sin competir, era un primer test importante, y creo que lo he superado con un partido correcto”