CARA A CARA
Mercedes quiere mantener su hegemonía en la era híbrida de la F1con el W09, de filosofía continuista Ferrari, con su SF71-H, aspira a luchar por el título con un coche que “ha mejorado en todas las áreas”
Tras un largo invierno, la batalla ya ha empezado. Ayer, en Brackley y Maranello, Mercedes y Ferrari empezaron a tocar sus tambores de guerra para avisar a su gran rival de que ya están listos para que empiece la pelea por el trono de la F1 de 2018. Mercedes lo hizo primero desde el Circuito de Silverstone presentando su renovada ‘flecha de plata’, el W09, y la firma italiana contestó desde Maranello unas horas más tarde con el SF71-H. El gran dominador de la era híbrida, ganador de los últimos cuatro títulos de pilotos y constructores, contra el gran aspirante, aquel que osó poner en duda la hegemonía de Mercedes el pasado curso con un gran inicio de año y que terminó arrodillándose ante el poder de su contrincante por su falta de fiabilidad y menor potencia en la segunda parte del campeonato. Ahora, con la moral renovada los italianos ansían haber creado el arma capaz de poder arrebatarle la corona a los de Brackley, que aseguraron haber mejorado todavía más un coche que el año pasado volvió a ser el mejor.
Aviso para navegantes el enviado por Toto Wolff, jefe de Mercedes, en la presentación de ayer. “Hemos intentado mantener nuestra filosofía de los últimos años y desarrollarla. La normativa se mantiene estable en 2018, así que no hay muchos cambios. Los cambios están en los detalles. Lo más visible es la estrechez del conjunto. Esperamos mantener el carácter de ‘diva’ del coche, pero el pasado curso era un monoplaza difícil de entender y este año queremos entenderlo mejor y mejorar su manejabilidad”, comentó el austríaco mirando fijamente un monoplaza que Hamilton no dudó en calificar como “obra de arte”.
Mercedes fallaba en la gestión y calentamiento de los neumáticos así como en el balance de su coche en los trazados más virados, y es ahí donde podrían residir las mejoras de “pequeños detalles” a las que se refiere Wolff, que remarcó la línea continuista tomada por su equipo.
Esperanza en Ferrari
Tras diez años de sequía, en Maranello ayer la presentación del SF70-H despertó mucha ilusión. La sensación no es como la de los años anteriores. Son conscientes de que en 2017 dañaron a su rival aunque finalmente no pudieran con él, y partiendo de la base del coche del pasado año, trabajaron para “mejorar en todas las áreas”, poniendo especial énfasis en los talones de aquiles del ‘Cavallino Rampante’ el año pasado, su menor velocidad en recta y peor rendimiento en circuitos de pura velocidad.
“Mantenemos los puntos fuertes del coche del 2017, como el buen nivel de carga aerodinámica, ya que en pistas de alta y poca velocidad se comportaba bien. Además, mantenemos los conceptos agresivos que ya teníamos mejorando en todas las áreas. En 2018, en circuitos de alta velocidad el coche tendrá buen rendimiento y hemos querido mejorar también en cuanto a fiabilidad del propulsor, porque podremos usar menos motores. Por ello hemos tratado de aumentar la potencia también. El coche tiene una mayor distancia entre ejes (es más largo) y el cuerpo es mucho más estrecho. Creemos que esta es una buena base para trabajar en las evoluciones aerodinámicas”, desveló Binotto ante los ojos de un Vettel que no podía “esperar más” para subirse al coche. Lo hará el lunes, día en que empezará a conocer si su nuevo Ferrari está a la altura del Mercedes en Barcelona en los test de pretemporada (del 26 de febrero al 1 de marzo y del 6 al 9 de marzo). Las cartas ya están boca arriba
Toto Wolff
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Este año queremos entender mejor el McLaren y mejorar su manejabilidad”
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Los principales cambios están en los detalles”
Mattia Binotto
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Mantenemos los puntos fuertes del Ferrari de 2017”
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En circuitos de alta velocidad tendrá buen rendimiento”