Más en segundas partes que en primeras y al contragolpe que en estático

El Barça de Valverde alcanzó ante el Atlético el listón de los 100 goles en lo que va de temporada. Ha necesitado 44 partidos (27 de Liga, 7 de Champions, 8 de Copa y los 2 de la Supercopa de España), cifra algo inferior a campañas anteriores. Pasados por el escáner, esta voluminosa cuenta goleadora ofrece detalles sintomáticos de cómo es y cómo actúa el equipo azulgrana. Ni en Liga ni en Champions anota tantos goles como en campañas anteriores pero de nuevo opta a conquistar el triplete.

Sólo en 5 partidos se han quedado a cero, aunque tres de ellos han resultado a la larga intrascendentes (Juve y Olympiacos en Champions y Espanyol en Copa). Y cuando lo hecho se ha inclinado preferentemente por las segundas partes. Nade menos que 65, de los que 25 los ha logrado en el último cuarto de hora, lo que demuestra la alta presión y la mentalidad ofensiva del método Valverde.

La dupla Messi-Luis Suárez se reparten 55 goles y 10 el resto de delanteros. Teniendo en cuenta que Deulofeu, que anotó dos, ya no está en la plantilla, la importancia del binomio argentino uruguayo es absoluta. La aportación de los medios también está resultando notable. 20 tantos por 9 de los defensores. De todas formas, el dato más significativo es que el Barça ha logrado 49 goles al contragolpe o en jugadas sin tanta elaboración. Las causas hay que buscarlas en que las líneas están mucho más juntas, no se rompen tanto y no hay extremos puros.

A estas alturas de la Liga, solo el Barça de Pep 20102011 (74 puntos), el de Tito 2012-2013 (71 puntos) y el de Lucho 2015-2016 (69 puntos) tenían igual o la misma puntuación que el Barça de Valverde 2017-2018 en 27 jornadas. Sólo Tito llegó a los 100 puntos al sumar 29 de los 33 que le quedaban. El Barça actual deberá aplicarse mucho para batir este récord. Como mucho se puede dejar dos