Los niños de la cantera visitan el Museu para conocer mejor la historia del club

nos llaman ‘culers’?

Abren los ojos para ver la foto del campo de la calle Industria y lo entienden al instante.

* ¿Sabéis por qué nuestros colores son el azul y grana?

* Yo no. Yo soy del Atlético de Madrid.

La confesión es de Aitor, uno de los porteros del equipo. Ni sus padres saben decir porqué su hijo es colchonero. Hugo, el otro portero, alucina con los guantes de Sadurní, un guardameta que no sabía que existía. En otra vitrina, les gusta ver las botas de Suárez ,de Messi y de Dembélé. “¿Y las de Neymar?”, pregunta Moaad, algo decepcionado. Marc le cuenta que ya no está en el Barça. Después de Gamper saltamos hasta a Cruyff y el 0-5. Las fotos en blanco y negro les interesan poco. Despiertan, de golpe, de ellas. Tampoco lo reconocen. Luego les muestra la imagen de Carles Naval, el delegado del equipo, el único que sale en el póster de las cinco Champions ganadas hasta hoy. Un buen dato.

“Ahora llegamos al espacio más fotografiado de todos los museos de Catalunya. Es el rincón dedicado a Messi”. Ante sus cuatro Botas de oro y sus cinco Balones de oro, Moaad, el centrocampista de Badalona, insiste en su idea: “El mejor del mundo es Neymar”. Le pregunto por qué lo tiene tan claro y me suelta, sin dejar de andar, “por los regates”. Otro compañero, al ver la foto de Xavi, Iniesta y Messi juntos, con el Balón de Oro, suelta: “Estos son los que me gustan a mí”. Es Ignasi. También juega de medio, evidentemente. Después de ver, atónitos, que en el vestuario rival del Camp Nou hay un jacuzzi, se preparan para saltar al césped. Ignasi, que se presenta como “el Messi diestro”, quiere saltar el último al campo, como Leo. Moaad, tu, i mi, i a tot l’equip. Barça!” Es el grito de guerra de la cantera. Si llegan a juveniles, lo van a cantar durante doce años sin falta, antes de cada encuentro.

Al abandonar el césped, Erik señala el foso para la policía y le pregunta al guía:

* ¿Aquí se sienta Bartomeu?

* No, el Presidente se pone ahí arriba –su dedo indica el palco.

- ¿Me puedo sentar en el sitio de Bartomeu?

Mira por dónde, en el primer peldaño de la cantera hemos descubierto otro aspirante a

Piqué.