Problema defensivo
Con Thiago acompañando a Busquets e Iniesta en medio campo, España entró al partido llevándose la primera sorpresa: Marruecos con el “cuchillo entre los dientes”.
Primer cuarto para los de Hervé Renard gracias a la presión intensa del 1-4-1-4-1 situado en propio campo -para robar y salir a toda pastillacon
N. Amrabat, Ziyech o el zancudo delantero centro Boutaib muy concentrados en contragolpear. Y como sucedió ante Portugal, un fallo inesperado ¡entre Iniesta y Ramos!, escapada de Boutaib y gol por debajo de las piernas de De Gea. Marruecos, enchufadísima. Pero la calidad de la banda izquierda se juntó -Alba, Isco e Iniestay 5 minutos después llegó el tuyamía entre Andrés y el malagueño con derechazo final de éste, de abajo a arriba ante Munir, para certificar el empate. España bien con balón, desconcertada sin él Faltaba presión inmediata o repliegue de líneas a más velocidad porque Marruecos estaba ’on fire’. Y lo demostró con un simple saque de banda en el que Khalid Boutaib, ¡otra vez!, enfiló portería pero esta vez De Gea evitó un mayor problema defensivo y, sobre todo, psicológico.
Pese a eso, España merecía el segundo gol por insistencia, buenos desmarques de Costa y la genialidad de Iniesta e Isco. Duro primer tiempo (las tarjetas no frenaron el ímpetu marroquí) a la espera de compensar ataque por banda de Silva y Carvajal y ganar duelos en campo propio.