“Compartimos la pasión por el fútbol”
Mi hijo nos pide siempre que disfrutemos del Mundial pero nunca en mi vida lo he pasado tan mal como el día del partido contra Japón. Me desmoroné con el tercer gol. Robert sigue siendo el mismo de siempre, es afable y cercano con todo el mundo y no se d
Los Martínez Prior son una estirpe de entrenadores cuyo más reconocido representante se sentará hoy en el banquillo visitante del Kazán Arena para dirigir a la selección de Bélgica en los cuartos de final del Mundial de Rusia.
El padre de Robert, Roberto, inició la tradición familiar hace décadas. Fue técnico del Balaguer durante doce temporadas cuando el club militaba en Tercera División. El último heredero de la saga es Pau Prior, el hijo de Antonieta, hermana de Robert. Con sólo 24 años es el entrenador del Artesa de Segre, de Segunda Catalana. “No sé si soy el más joven, pero podría ser”, comenta. Lleva desde los 16 años en los banquillos y quiere hacer carrera. “Robert es el referente más cercano, compartimos la pasión por el fútbol y hablamos mucho pero tenemos ideas muy diferentes”, confiesa el sobrino.
“Él pasó de jugador a entrenador con una propuesta muy diferente a lo que había allí, donde casi nadie se salía del 4-4-2 y del juego directo; eso tiene mucho mérito”, dice Pau con admiración. “A mí me gustan más el Atlético de Simeone o el primer Chelsea de Mou”, explica, “equipos que defienden muy bien y salen bien a la contra”. Sobre el partido de cuartos, Pau cree que la ausencia de Casemiro “es la clave” para que Bélgica pueda estar en ‘semis’.
Confiesa Roberto, el patriarca, que ya no discute con su nieto desde que le dijo que “el fútbol de ahora no tiene nada que ver con el de hace 40 años”. “El fútbol es fútbol”, resume el abuelo