At. Barceloneta vs. Mediterrani, una final inédita
El Atlètic Barceloneta, vigente campeón, y el CE Mediterrani, que no llegaba a la final desde 1996, se disputarán hoy el título de la Copa del Rey de waterpolo (12.00 h) tras batir respectivamente en semifinales al CN Barcelona por 12-4 (2-0, 4-0, 3-1 y 3-3) y al anfitrión, el Quadis Mataró, por 76 (2-2, 2-2, 2-0 y 1-2) en la piscina descubierta del equipo mataronés.
La primera semifinal no tuvo prácticamente historia porque, tras un primer cuarto igualado (2-0), el Atlètic Barceloneta rompió el partido en el segundo con un contundente 4-0 que lo dejó todo decidido al descanso (6-0) gracias al acierto de Fran Fernández, autor de cuatro de los seis goles de su equipo. La baja del boya Sam Henrinke Van den Burg, lesionado en los cuartos de final, la pesó mucho al CN Barcelona, que nada más comenzar la segunda mitad encajó el 7-0 por medio de Álvaro Granados de penalti y a continuación el 8-0 de Alejandro Bustos.
El CN Barcelona no entró en el partido hasta entonces, cuando Víctor Flores, a 4’50” del final del tercer cuarto, logró el primer gol para su equipo en un lanzamiento lejano que rebotó en la cabeza de Bustos. El cuarto periodo, en el que se entró con 9-1 para el At Barceloneta, fue el más igualado y acabó con empate (3-3) para cerrar el duelo con el 12-4 final.
La segunda semifinal entre el Mediterrani y el Mataró fue mucho más igualada que la primera. El conjunto barcelonés se llevó el triunfo gracias a su mejor segunda parte, en la que Guillem García y Javier Gorría pusieron los goles (dos cada uno), y Ramon Santís las paradas. A pesar de la derrota final, el Quadis Mataró gozó de la oportunidad de llevar el partido a los penaltis con un remate de George Ford al travesaño y un último ataque en el que perdió el balón.
Será la primera vez desde 1996, cuando perdió por 6-2 contra el CN Barcelona, que el Mediterrani jugará una final de la Copa del Rey y la décimo cuarta consecutiva para el Atlètic Barceloneta, que es el gran favorito para conquistar su decimoquinto título