Vivir y morir desde el triple
El Barça lo confió casi todo a un arma que no le es habitual y con un acierto discreto
o intentamos pero no estuvimos suficientemente frescos”. Este es el primer análisis que hizo Svetislav Pesic de la derrota del jueves ante el Valencia. Parece una broma, pero es lo que dijo: el Barça, que tiene una plantilla de 15 jugadores, más Bolmaro, perdió porque tuvo menos energía que su rival, que tiene una de 14 y disputa las mismas competiciones. no de los grandes problemas de este Barça es la falta de coherencia. Desde el club han apostado de manera ciega por la expansión de la Euroliga, que de un máximo de 23 partidos hace diez años ha pasado a 41. Ello ha llevado al club a redimensionar su plantilla, que de los doce jugadores de hace unos años ha pasado a ser de quince. De cajón: para afrontar una temporada tan larga y cargada es necesario contar con más jugadores. ero luego resulta que el club coloca al frente del equipo a Pesic, un entrenador que reconoce que se mueve mucho mejor con rotaciones cortas y jugando los partidos con 9-10 jugadores. De los 15 senior que tiene el Barça, uno (Pustovyi) parece estar de adorno y otros dos (Smits y Ribas) descansan en más partidos de los que juegan. Y eso con Pangos y Heurtel KO en lo que va de temporada. i de verdad existe esa falta de frescura la culpa es de Pesic por no haber sabido utilizar todos los recursos que tenía a su disposición. Y de los que han apostado por esa mayor inversión -justificada por el calendario- pero la han puesto en manos de alguien que no cree en ella
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