Nuevo ‘look’ del capitán
a nueva normalidad será un fútbol sin espectadores presenciales cuando la temporada acabe allá por los calores de finales de julio. El presidente Sánchez anunció la buena nueva el sábado. Habrá fútbol. Tebas ha impuesto sus planes y se salvan unos 500 millones de euros que dependían de la finalización de la temporada, con once jornadas de Liga que se disputarán día sí y día también. Los contratos con la televisión habrá que cumplirlos aunque las audiencias no sean las previstas.
También se podrá celebrar la final vasca de la Copa del Rey y reanudar la Champions interrumpida en la primera vuelta de los octavos de final. El Barça, en principio, recibirá al Nápoles el 8 de agosto tras el empate a uno en San Paolo en los octavos de final. El Madrid podrá jugar la segunda vuelta contra el Manchester City de Pep Guardiola, que ganó en el Bernabéu por 1-2. La final de Estambul sería el 29 de agosto.
El reanudar a toda costa las competiciones de fútbol puede ser beneficioso para las televisiones. No estoy tan seguro que sea positivo a medio plazo para el fútbol de alta competición. Será un final de temporada un poco ‘fake’ en el sentido de que se simulará el griterío después de los goles con audios preparados al respecto. En Alemania han probado tener una presencia virtual en el estadio colocando figuras de cartón a quien pague una cuota. El periodismo deportivo es lo suficientemente profesional para crear emociones apasionadas. Las gradas serán testimonios mudos
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