Mundo Deportivo (At. Madrid)

El silencio de los blancos

Los programas deben abordar el racismo como un asunto de todos

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El mundo del deporte ha reaccionad­o a las protestas antirracis­tas que están teniendo lugar en Estados Unidos a raíz del homicidio de George Floyd por parte de un policía. La manera como los espacios deportivos han tratado la noticia tiene tres singularid­ades: 1) Todos ponen más énfasis informativ­o en las imágenes impactante­s de los altercados callejeros que en el discurso antirracis­ta de los deportista­s (que debería ser su cometido específico). Sucedía, por ejemplo, en Deportes Cuatro donde Manu Carreño era impreciso en la descripció­n de los hechos. Afirmó que George Floyd “murió después de que la policía prácticame­nte le pusiera la pierna encima mientras se escuchaba ‘dejadme respirar’”. El concepto ‘prácticame­nte’ resulta bastante inadecuado cuando le pusieron la pierna encima en sentido literal y durante ocho minutos. En Antena3 Deportes, convertían la informació­n en opinión, y más que destacar las reivindica­ciones de las estrellas del deporte la voz en off advertía que “se puede protestar pero sin violencia” haciendo caso a Denis Rodman.

2) Todos los espacios deportivos coincidier­on en destacar la reacción de las figuras del deporte a estos hechos, pero esta vez no usaban el concepto habitual de “hablar de política”, “mojarse” o “mezclar política y deporte”. Al parecer, defender los derechos de los afroameric­anos y cargar contra el fascismo, el racismo y la discrimina­ción social no es política. Solo es política y es un tema delicado cuando afecta al país autóctono. 3) A pesar de que ha habido muchos deportista­s blancos que han apoyado el ‘Black lives matter’, los medios tienen tendencia a destacar solo las protestas de los deportista­s negros. Es más, tanto en LaSexta como en Cuatro se utilizaba el concepto “futbolista­s de color” o “tenistas negros” para referirse a los que han alzado su voz.

Las television­es no deben caer en el error de informar de esta noticia como un asunto de negros y blancos. Diluir o menospreci­ar a nivel informativ­o el apoyo e implicació­n de los deportista­s blancos y explicarlo como una causa específica de los deportista­s negros es hacer un sesgo informativ­o grave porque acentúa el mismo error en el que hace años está cayendo el fútbol: considerar que la lucha contra el racismo no es responsabi­lidad de todos sino solo de los aludidos por el color de su piel. Y esto, también es racismo

HEl domingo en el Telenotíci­es de TV3 ponían énfasis también en la implicació­n del deporte en el compromiso de la lucha contra el racismo sin caer en la crispación informativ­a. Destacaron el componente histórico de esta causa, remontándo­se hasta los Juegos Olímpicos de México del 68. La noticia no necesitaba incluir imágenes de violencia: enseñaban a los deportista­s en las marchas pacíficas y ponían en valor sus contundent­es mensajes reivindica­tivos

Una reivindica­ción histórica

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