Mundo Deportivo (At. Madrid)

De rodillas pero en pie contra el racismo

- Marta Pérez Kyle Rudolph, jugador de los Minnesota Vikings, en una de las acciones contra el racismo promovidas por la franquicia

Kaepernick y su gesto, más referentes que nunca a pesar de las amenazas de Trump

Las protestas han hecho que la NFL tome conciencia sobre el problema

“Llegarán peticiones de paz pero, cuando llegue el momento, caerán sobre el oído de un sordo, ya que vuestra violencia ha apoyado esta resistenci­a. Tenemos derecho a reaccionar. Descansa en paz, George Floyd”, escribía Colin Kaepernick en las redes sociales tras conocerse que este había muerto estrangula­do por un policía en Minneapoli­s. Activo a nivel social desde que se atrevió a desafiar al sistema poniéndose de rodillas mientras sonaba el himno estadounid­ense en 2016, Kaepernick ve cómo su liderazgo en materia racial empieza a surtir efecto en la conciencia de una NFL que le repudió en su día por su defensa de los derechos de la población negra.

El primer paso para buscar la solución de un problema es reconocer su existencia. Esa ha sido la gran lucha de Kaepernick durante años, en los que ha sido apartado por un mundo del fútbol americano que le idolatraba meses antes. El rechazo de los equipos que no querían vincularse a su activismo social ha sido durante años la metáfora más fiel de la situación vivida por gran parte de la raza negra de Estados Unidos. Tan solo el tiempo dictaminar­á si las protestas sociales que rodean estos días a la indignació­n por la muerte de Floyd tienen un reflejo real en la sociedad estadounid­ense. A corto plazo, al menos, el movimiento y la constante lucha de Kaepernick parecen empezar a despertar conciencia­s en el seno de la NFL.

Roger Goodell, comisionad­o de la liga, ha sido uno de los dirigentes deportivos más activos en los últimos días en la condena del caso Floyd. No ha dudado en pedir una necesidad urgente de acción a nivel nacional contra el problema del racismo y ha reconocido el papel social que la NFL puede desempeñar en esta lucha. Su postura choca radicalmen­te con la visión que él mismo mostraba en el apogeo del ‘caso Kaepernick’ hace más de tres años, todo un símbolo de evolución a la vista de que la importanci­a del problema racial es tan grande como la implicació­n mostrada por el jugador.

Además, el cambio de postura de Goodell y de la NFL no solo se ha quedado en palabras. La liga ha trabajado con los equipos para destinar 250 millones de dólares durante los próximos diez años para combatir el problema racial, una idea apoyada por los jugadores. Varios equipos han llevado a cabo acciones de conciencia­ción y jugadores como el quarterbac­k de los Saints Drew Brees han pedido perdón por su postura pasiva para mostrar de inmediato su apoyo a la lucha.

La oposición de Donald Trump

A pesar de la toma de conciencia social, la NFL no ha dado todavía el paso de pedir perdón públicamen­te a Colin Kaepernick por la situación vivida durante estos años. Más allá de este notable borrón, Goodell sí ha reconocido al fin el problema y ha animado a los jugadores a luchar contra las injusticia­s raciales. “Admitimos que nos equivocamo­s por no escuchar a los jugadores de la NFL antes y les alentamos a todos a hablar y a protestar pacíficame­nte”, explicaba el comisionad­o hace unos días en un vídeo. “Las vidas de los afroameric­anos importan. Sin ellos, no habría NFL”, admitía.

Faltará ver la aplicación real de las propuestas en medio de una tensión creciente entre la liga y el gobierno de Donald Trump, tremendame­nte molesto con el cambio de opinión de un órgano tan potente como la liga. La idea de que los jugado- res se arrodillen como señal de pro- testa durante el himno nacional, tal como patentó Kaepernick, parece ir convencien­do a la NFL, situación que ha provocado el rechazo total del presidente, quien incluso ha he- cho una llamada durante estos días para boicotear las emisiones de los partidos.

Porque la NFL empieza a tomar conciencia en materia racial, un pa- so que era ampliament­e demanda- do por la sociedad afroameric­ana. El asesinato de Floyd ha despertado a la organizaci­ón. Con gran parte del país arrodillad­o como símbolo de protesta, la liga parece haberse puesto al fin en pie para luchar con- tra el racismo

HDaniel Berger se convirtió en el primer campeón tras la pandemia de coronaviru­s tras llevarse en la noche del domingo, en el desempate, el título del Charles Schwab Challenge, pertenecie­nte a la PGA y disputado en el Colonial. En un apretadísi­mo final de la cuarta ronda, Berger igualó con Collin Morikawa a -15 y ambos resistiero­n la presión del -14 de Justin Rose, Jason Kokrak, y un Bryson DeChambeau y un Xander Schauffele que dilapidaro­n sus opciones con sendos bogeys en el hoyo 17. El adiós de Schauffele, quien llegaba como líder al domingo, llegó con una opción clarísima de par de apenas un par de metros que no supo convertir.

Así, Berger, cinco birdies y dos bogeys en el día, se jugó el título en el desempate con Morikawa, cinco birdies y un bogey. Fue en el par cuatro del hoyo 17 donde otro error similar al de Schauffele, con un putt muy factible para par de Morikawa, generó el bogey que despidió a este del torneo. Berger, con par en ese hoyo, sumó así su tercera victoria en el PGA Tour, tras los dos títulos conquistad­os en el St. Jude Classic en 2016 y en 2017. Berger, además, puso fin a su mala racha en los playoff de desempate, ya que había perdido los dos anteriores que había jugado, uno en el Honda Classic de 2015 contra Padraig Harrington y un segundo en el Travelers Championsh­ip de 2017 frente a Jordan Spieth.

Spieth, precisamen­te, no tuvo opciones de meterse en la pelea por el torneo tras una jornada final con cuatro birdies y cinco bogeys que le alejó de cualquier opción de levantar un trofeo dos años después. Terminó décimo, empatado con Justin Thomas y con J.T. Poston con -11. Quien también se despidió de toda opción de victoria fue Rory McIlroy, trigésimo segundo con -6 tras un devastador +4 en la jornada final. Rory, no obstante, se aseguró mantener el número 1 del mundo esta semana tras el pinchazo de Jon Rahm. Rafa Cabrera, por su parte, finalizó vigesimote­rcero con -8 tras ganar dos golpes al campo en la vuelta final Marta Pérez

H

 ?? FOTO: AP ??
FOTO: AP

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain