Mundo Deportivo (At. Madrid)

Un líder a la altura del desafío

- José Ignacio Huguet @josehuguet

l fracaso no depende de ganar o perder. El fracaso consiste en no responder a las expectativ­as realistas con las que afrontas un objetivo. Lo del Barça en Valencia es un fracaso en toda regla, no tanto por perder la final de Liga Endesa a un partido sino por lo lejos de sus metas que ha cerrado el equipo azulgrana la temporada que ahora acaba. l Barça construyó el pasado verano el proyecto más ambicioso de su historia, con una inversión récord para la sección de baloncesto, y el resultado ha sido cero títulos. Al equipo azulgrana se le puede perdonar la derrota en la final de la Supercopa ante el Real Madrid pues en septiembre estaba todavía muy verde, pero son mucho más difíciles de digerir su eliminació­n a manos del Valencia en los cuartos de final de la Copa del Rey y el revés ante el Baskonia en la final de una Liga Endesa que parecía haberse convertido en una autopista hacia el cielo para los azulgrana gracias a la temprana eliminació­n del Real Madrid. un partido puede pasar de todo, es cierto, pero hay maneras y maneras de perder. Con el eterno rival eliminado, perder la final ACB es mucho más doloroso. Y más si cedes ante un Baskonia que llega tras una de sus peores temporadas recientes, muy mermado de efectivos y con un Shengelia renqueante. Por no hablar de la discutible gestión de Pesic en muchos momentos de la final, como su decisión de mantener en pista a Mirotic cuando lo estaba fallando todo, primero, y cuando estaba con cuatro faltas, después, o la ausencia de Claver en la última defensa y de Heurtel en el último ataque. l Barça lleva ya seis años sin ganar la Liga Endesa y se ha quedado en blanco en esta temporada 2019-2020. Pero más grave que todo eso es que no se le ve traza alguna de convertirs­e en un equipo destinado a marcar una época, intención con la que se abordó la gran inversión del verano pasado. El Barça tiene un extraordin­ario poderío físico y un talento sensaciona­l pero le falta alma de campeón, esa que se construye añadiendo otros ingredient­es a la fórmula, como compromiso, estilo definido, automatism­os, continuida­d y, sobre todo alegría y buen rollo. Un equipo destinado a marcar una época es un equipo en el que todos van a una y saben a qué juegan. Para entenderlo mejor, pienso en el Real Madrid de los últimos años o las seleccione­s españolas tanto masculina como femenina. l Barça es un equipo temible, pero con Pesic nunca habría podido ser un equipo diez. Sin la comunión jugadores-entrenador, sin ese ‘feeling’ especial surgido de la admiración y el respeto mutuo, eso es imposible. Para alcanzar su potencial y aspirar a las más altas metas, el Barça necesita un líder en el banquillo al que sus jugadores sigan ciegamente por convencimi­ento y no por miedo ni simplement­e por dejar de oírle gruñir. n líder como el que disfrutaro­n tantos equipos con Zeljko Obradovic, el Real Madrid con Pablo Laso, el Zalgiris con Sarunas Jasikevici­us o el propio Barça no hace tanto con Xavi Pascual. i el club azulgrana quiere marcar una época con este equipo, necesita en el banquillo un líder a la altura del desafío

H

 ?? FOTO: MANEL MONTILLA ?? Pesic, aleccionan­do a Delaney
FOTO: MANEL MONTILLA Pesic, aleccionan­do a Delaney
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain