El contrato sin firma
Transcurrida una semana de su publicación, la pregunta, sin respuesta, del millón de euros continúa siendo la de conocer la identidad del filtrador del contrato de Messi al Mundo del Siglo XXI. Si una cosa, de entrada, llama poderosamente la atención del documento reproducido, con todo tipo de alardes tipográficos, en el mencionado medio es que este carezca de las firmas que deben de figurar en el mismo, que serían además de la de Messi y el presidente Bartomeu, las del vicepresidente deportivo Jordi Mestre y el CEO Òscar Grau. Sin duda la presencia de dichas rúbricas le otorgaría un plus de credibilidad a los contratos, que, sin embargo, dan la sensación de aparecer recortados.
Esta mutilación documental tendría su razón de ser en que al publicarse sin firma alguna podría tratarse de un mero borrador del contrato y que por tanto únicamente estaría en posesión del jugador y del Barça. Con ello, dando por descartado a Messi, el foco se centra exclusivamente en el club, sobre cuyos responsables, el entorno del astro argentino anuncia inminentes querellas. ¿Pero a quien beneficia esta filtración? Al jugador y al club, no. Por tanto cabría pensar en un tercer elemento y quedarse con que la autoría de la publicación corresponde a un medio de la capital, cuya interpretación de la información es tan sesgada como perversa, cuando acusa a Leo de ser el dispendio que arruina al Barça.
Ni el peor de los enemigos del club blaugrana y de Messi hubiera utilizado un vocabulario tan agresivo contra ambas partes. Especialmente al retratar al jugador como una especia de tirano que ahoga económicamente a la entidad y a los dirigentes de la misma, de actuar con los pantalones bajados ante el poderío del ídolo que tanto idolatra la afición y al que nadie sería capaz de ganarle un pulso.
Vista la procedencia de la publicación, no sería nada descartable situar el origen de la misma en Madrid, que es donde más se han celebrado los efectos de la misma. Por ello, y para evitar sospechas, se hace desaparecer
Vista la procedencia de la publicación, no sería descartable situar su origen en Madrid
las firmas, para restarle una oficialidad al documento, que al tratarse supuestamente del contrato auténtico, esta vería ampliado su radio de acción a toda una serie de organismos como La Liga, Federación, Hacienda o la Fiscalía, que perfectamente hubieran negociado por la difusión del documento. Conociendo la procedencia de muchas de las exclusivas publicadas por el Mundo Siglo XXI, algunas de ellas de las denominadas “cloacas del estado” y como en la capital han escocido los éxitos del Barça de Messi en la última década, no sería de extrañar que se haya pensado que la venganza es un plato que se sirve frío y que había llegado el momento de pasarle cuentas a Messi por su década prodigiosa en el Barça.
Mientras afloran todas las miserias del Barça nadie se pregunta por la crisis del Real Madrid y Florentino puede incubar sin sobresalto alguno el coronavirus. Porque ya se sabe que la mano de un ser superior puede llegar a ser muy alargada. Si no que se lo digan a Zinedine Zidane, que harto de ser siempre el foco de las críticas, amenaza con explicar como de solo lo han dejado en el Madrid para solucionar una renovación del equipo sin haberse cerrado fichaje alguno. Y ya se sabe que esto de las crisis en el futbol estas viajan en puente aéreo y últimamente también en el AVE
H