De Irún al Mundial de Fórmula 1
se pagaba de su bolsillo el billete de tren para ir a Valencia para limpiar ruedas hasta las 3 de la mañana. Sin exigencias. “El nivel de sacrificio era muy grande. Siempre prefería tener contacto directo con el equipo y poder trabajar juntos un par de días para luego poder acordar las condiciones en consonancia con sus necesidades y mis expectativas.” , dice Gorka, que dio un salto más en su carrera al conocer a Pepe Oriola en la escuela. “Me fui con él al Mundial de Turismos y también hacía el Europeo con su hermano, siendo el jefe de coche. Y luego me ofrecieron un trabajo. Así empezó todo”, recuerda.
Sueño cumplido
Pasó por el Mundial de Rallycross junto a All Ink Racing y finalmente, alcanzó la F1 con Manor. Allí se encargó de las cajas de cambios y la parte trasera de Esteban Ocon, actual compañero de Alonso en Alpine. Y a los tres meses, llegó la llamada de Williams Racing. “Para poder ser leal a mi palabra con Manor les dije que me uniría a ellos al final de temporada. Williams aceptó y entré en el puesto de segundo mecánico en 2016”, agrega a MD. En Grove empezó haciendo un poco de todo, y al final de 2017, tras la marcha de uno de los jefes de coche de Williams, entre 5 aspirantes a ese puesto, fue escogido para ascender. En 2021 ha pasado a ser primer mecánico del coche de George Russell encargándose de coordinar el trabajo del monoplaza: “Me aseguro de que el coche está montado con las especificaciones correctas y de que todos los procedimientos se hagan correctamente para poder asegurar la máxima fiabilidad y rendimiento”.
“¿Qué le diría a los jóvenes? Que llegar es posible, pero hay que hacer muchísimos sacrificios. Hay que trabajar muy duro, demostrar tu pasión, dejar a un lado el querer ganar mucho dinero, la fama, y centrarse en aprender cada día”, añade el irunés, orgulloso de su camino. De Irún al mundo.
“Para llegar a la F1 hay que trabajar muy duro y dejar de lado la fama y el querer ganar mucho dinero”