Jueguecitos para los tres candidatos
El programa ‘Està passant’ organizó un cutre-concurso para los presidenciables
Joan Laporta no asiste a debates junto a sus adversarios para que el socio pueda comparar modelos de gestión del club. En cambio, sí participa en concursos (algo cutres) de programas humorísticos. Algo es algo. El socio indeciso ya tiene algo a lo que aferrarse a la hora de confrontar los tres perfiles. El martes, en TV3, enel‘ Està passant’ de Toni Soler, la humorista Elisenda Carod organizó un juego distendido para conocer mejor a los presidenciables y, de paso, evaluar su cultura culé. Los candidatos participaron por separado y se fusionó la competición en el montaje.
Un juego distendido por puro entretenimiento, sobre todo a la hora de puntuar: el programa hizo unos sospechosos equilibrios para que el marcador no quedara excesivamente desigualado ni nadie saliera maltrecho. Deben de ser las bondades del servicio público. A primera vista era un juego inocente, pero después te dabas cuenta de que algunas preguntas tenían su enjundia. Pueden recuperar el concurso en el servicio a la carta de la cadena.
Primero les preguntaban los motivos por los cuales cederían las instalaciones del Camp Nou: como sede para un referéndum para la independencia, para un concierto de Bertín Osborne o para una final de Champions entre el Madrid y el Espanyol. En esta última, las respuestas tuvieron gracia. Carod también les preguntó por detalles de la campaña de sus adversarios. Quizá fue la fase menos fructífera. También les invitó a dibujar el escudo del Barça de memoria y el resultado fue para troncharse de risa, especialmente con el abstracto croquis de Víctor Font. La humorista les hizo deletrear los nombres de algunos jugadores como Van Bronckhorst y les conminó a revelar a cambio de qué triunfos culés se vestirían con la camiseta del Real Madrid.
Seguramente este juego trivial ha sido uno de los momentos de la carrera electoral en que más hemos visto a los presidenciables pincharse entre ellos con cierta alevosía. Ya era hora. Lo lamentable es que tengamos que recurrir a este tipo de jueguecitos para compararlos a los tres en acción y en ciertas condiciones de igualdad (que no de simultaneidad)
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