Espai Barça
En el pasado artículo publicado en esta sección, titulado ‘La otra noche del PSG’, se hacía un repaso de la situación por la que está atravesando el FC Barcelona. En el texto se apuntaba que, además de rehacer el proyecto deportivo y sanear de nuevo la entidad, el Espai Barça emergía como uno de los temas cruciales para la etapa que se abre después del 7 de marzo.
En el artículo se comparaba la diligencia del Real Madrid CF a la hora de aprovechar el parón de la Covid-19 y jugar en Valdebebas para acabar el estadio Bernabéu e iniciar la nueva etapa post pandemia con un campo audaz en lo arquitectónico, reluciente y tecnológicamente al día. En el artículo se comparaba esa situación con la del Barça. Han pasado seis años desde la aprobación del referéndum de la remodelación del estadio y todo esta por hacer.
Jordi Moix, ex vicepresidente del Barça con Josep Maria Bartomeu, y el comisionado del desarrollo del Espai Barça, fue una de las personas que me comentó el artículo. Moix, por whatsapp, negaba la mayor en algunas de las opiniones vertidas en mi artículo, y en su mensaje de réplica desarrolló toda su teoría sobre el Espai Barça y el legado que encontrará la nueva directiva. Por su interés informativo, estos son los puntos y las reflexiones del ex directivo.
Moix escribió: “1. Sin permisos municipales no se puede avanzar: es ilegal. 2. La transformación de territorios amplios en Barcelona son muy complejos. 3. Diagonal en el Poble Nou, la Sagrera, el Port Vell, son ejemplos de ello. 4. Ni Núñez ,ni Laporta pudieron conseguir permisos antes de hora. 5. La actuación de Florentino afecta a tres hectáreas de la castellana, y el Espai Barça, a 320. 6. Hemos dejado listos un legado, la ruta de actuación, los permisos, las formas de financiación y la posibilidad de que las obras empiecen este verano”.
El relato ajustado y serio de Moix, seguía su desarrollo incidiendo en los temas de la financiación del Espai Barça, la reparcelación, las evaluaciones técnicas, el proyecto arquitectónico de Nikken, la urbanización de la zona...
Gracias, desde aquí al ex directivo del que tanto apoyo recibí durante mi etapa en el FC Barcelona.
El trabajo del Espai Barça está a punto de arrancar si el nuevo presidente y su junta así lo deciden. Detener el proyecto Nikken y empezar a hablar de otro diseño, de otra idea... requeriría tirar a la papelera todo el trabajo realizado, convocar quizá otro referéndum - empezaríamos de cero- y perder varios años más.
Con el Real Madrid estrenando un estadio nuevo, con 13 Champions y la posibilidad de fichar a alguna súper estrella, el Barça se enfrentará con una posible marcha de Leo Messi, una situación financiera agobiante, una masa social dividida en lo político, con el inicio de las obras del estadio y con serias dudas sobre el futuro inmediato.
Los tres candidatos se han expresado de una u otra forma sobre el Espai Barça, pero la idea que más ha cuajado, quizá porque es el presidenciable más mediático, es la de Laporta. “Iremos a Montjuïc dos temporadas”. Laporta se alinea entre quienes piensan que la reconstrucción del estadio no puede hacerse en paralelo a las competiciones. No se puede estar, según el equipo de Laporta, cinco o seis años remodelando el estadio, en obras permanentes...
Este va ser el eje en el que pivotará el futuro del Barça. El Espai Barça. La cuestión deportiva es relevante, muy relevante, pero el eje económico sobre el que girará la economía y el futuro del club será el Espai Barça. Hay mucho trabajo por hacer...
El Barça y su idea de escuchar las voces de todos es buena, pero la historia nos demuestra que cuando se da la oportunidad de que hablen todos, de todo, el tema se tuerce inevitablemente. No se trata de democracia, ni de asambleas, ni de estatutos, se trata de gestionar un club muy complejo que requiere soluciones rápidas y eficaces. El Barça necesita tomar esas decisiones, y hacerlo rápido. Su futuro está en juego
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