Ahora somos más peligrosos
El sábado tras el partido contra el Getafe noté una reacción en algunos aficionados colchoneros, que solo los amantes del mejor club del mundo podrían tener. Tras el injustísimo empate, y comprobar como nuestros rivales directos recortan puntos, lo normal sería una reacción de nerviosismo. Especialmente tras el empeño nada disimulado de cierto sector de la prensa por querer hundirnos desde el inicio de la temporada. Los hinchas de otros equipos, en especial de los que están acostumbrados a tener el viento a su favor, ya estarían cantando sus penurias a los cuatro vientos.
Pero no. Muchos amigos rojiblancos me escribieron al instante para decirme: “¡Por fin esto se pone interesante de verdad Paulo! ¡Si no, no habría emoción, no sería el Atleti!”. Les noté todavía más ilusionados que cuando sacábamos más puntos a los rivales. Esto es puro Atleti. Un amigo merengue, sorprendido de la reacción colchonera en las redes, de que no nos viniéramos abajo con el resultado, me dijo “joé macho no hay quien os entienda, parece que estabais deseando que esto ocurriese. Os noto con más confianza ahora que cuando nos sacabais diez puntos. Ahora es cuando sois más peligrosos”. Razón no le falta en lo segundo: si hay un equipo que lleve en su ADN luchar contracorriente, ese es el Club Atlético de Madrid.
Puede que las cosas se hayan puesto más interesantes, pero será por las circunstancias del momento, porque por nuestra parte nada ha cambiado. Seguimos partido a partido. De hecho estamos en una dinámica muy positiva, como recordó el Cholo. De los últimos cuatro encuentros, vencimos a Villareal y Athletic de Bilbao, y empatamos muy injustamente contra el eterno rival y el Getafe. Hay días que la pelota simplemente no quiere entrar. El partido contra los azulones podría haber durado hasta el momento de publicar estas líneas, que el maldito balón no habría entrado.
Mañana nos enfrentamos ante el Chelsea y nos toca remontar el resultado en Londres. Francamente creo que lo suyo sería que el partido de vuelta se jugase en el mismo estadio de la ida, por ser campo neutral. Pero bueno, eso es un tema aparte. Todavía más épica para el Atlético de Madrid. Somos el único equipo no solo capaz de remontar una derrota... ¡como de remontar una victoria.. propia! El año pasado, aunque vencimos al Liverpool en la ida, cuando viajamos a Anfield la prensa vendió con tanto entusiasmo el clarísimo pase de los ingleses que parecía que teníamos que remontar un 0-5 en la vuelta. Sin embargo, nuestro Niño de Anfield, Marcos Llorente, les demostró que el Atleti es capaz de vencer en cualquier campo y a cualquier rival.
Hace poco se cumplió un año de la gesta histórica contra los Klopp y no me cabe duda que también seremos capaces de eliminar al Chelsea. Ojalá que el Niño de Anfield se convierta también en el Niño de Stamford Bridge y marque allí dos golazos que vuelvan a congelar todas las portadas. ¡Confío en ti Marcos! Y también que nuestro Menino de Oro, el gran Cholo Simeone y todos nuestros cracks volverán a Madrid clasificados para los cuartos de final junto a mi FC Porto, que se impuso heroicamente a la Juventus. ¡Aupa Atleti! ¡Aupa Atleti! ¡Aupa Atleti!
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