París no fue el último servicio de Larsson

N De dar los goles en 2006 a trabajarlos en 2021

LAS CLAVES Héroe en el pasado 1 Entró en la final de la Champions de 2006 como rematador con 0-1 y fue clave en la remontada al asistir a Eto’o y Belletti

El último partido que Henrik Larsson jugó con la camiseta del Barça fue la final de la Champions League en 2006 en París. Entró en el minuto 61 por Van Bommel con el Arsenal ganando 0-1 y se convirtió en uno de los héroes del equipo de Frank Rijkaard al dar las dos asistencias de la remontada (2-1): a Eto’o, con un toque sutil en el 76’, y a Belletti, con un pase sensacional en el 81’. El sueco, un goleador extraordinario durante toda su carrera, pasó a la historia del club azulgrana por regalar dos tantos inolvidables. Incluso vio una amarilla en el 93’ con una de esas faltas tácticas tan importantes en un momento así. A sus 34 años supo ser humilde aceptando el banquillo y profesional al darlo todo cuando entró. Y se reinventó como asistente de forma genial.

‘El último servicio de Larsson’, fue uno de los titulares en las páginas de MD que explicaron aquel partido. Pues no, no fue el último. El sueco está transmitiendo sus conocimientos ahora a los jóvenes delanteros como Ansu Fati, a

Clave para el futuro 2 Ansu y otros ya se han nutrido de sus sabios consejos

quien adoptó hasta su lesión, sin olvidarse de dar sabios consejos a jugadores más experimentados como Braithwaite, quien recordó a Larsson con el cabezazo entre los dos centrales que completó la remontada en la semifinal de Copa ante el Sevilla (3-0).

En la fiesta del doblete Liga y Champions de 2006, su nombre fue coreado por un Camp Nou lleno. Merece que vuelva a pasar cuando la afición vuelva al estadio

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