El ejemplo de Unzué

Este lunes se presenta ‘Una vida plena’ la biografía de Juan Carlos Unzué escrita por Ramon Besa, Marcos López y Lu Martín.

Una lección de cómo afrontar las bofetadas de la vida con lucha, aprendizaje y generosidad. Un relato devastador, pero con trasfondo optimista con un objetivo claro: Unzué quiere poner en el escaparate la ELA y recaudar fondos para combatirla. La ELA es una enfermedad despiadada, letal e injusta. La mayoría de las veces ni los que la padecen, ni sus familias llegarán a recibir las ayudas puesto que, cuando la pesada burocracia termina su curso, ya no existe paciente al que ayudar.

La deportividad y vitalidad con la que Unzué ha aceptado esta fatalidad del destino es encomiable. Con la misma energía con la que le veíamos ordenar las jugadas de estrategia desde la banda en el Camp Nou, cuando era el 2º de Luis Enrique

y el rey de la pizarra. Un chaval de Orkoien que soñaba con ser Arconada. Un portero adelantado a su tiempo, bueno con los pies y “parapenaltis” que jugó 17 temporadas y entrenó nueve, antes de que la ELA truncara su carrera y su vida.

No debe ser fácil acostumbrarse a la incertidumbre por más que se vea venir la jugada. El relato de como Unzué

combate la enfermedad, como la comunicó a su familia o como se ha sometido a ensayos clínicos es muy duro. “¿Si no hacemos nosotros de conejillos de indias, quien lo va a hacer?”. Un discurso impactante, como se pudo ver en el vestuario de Osasuna. “Cuando estéis jodidos acordaros del cabrón de la silla de ruedas para levantaros y seguir”. No les vendría mal leer “Una vida plena” a los ya jugadores de Xavi .Un equipo sin personalidad y derrumbado emocionalmente que necesita encontrar la forma de levantarse