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El Barça reacciona a las críticas de Saras con una sufrida victoria sobre el CSKA que le pone líder Los azulgrana no se rindieron tras un 13-33 y levantaron en el último cuarto un partido loco
El Barça logró anoche ante el CSKA Moscú algo más que una victoria. El equipo azulgrana respondió a las críticas de su técnico Sarunas Jasikevicius, que había acusado a sus jugadores de “falta de profesionalidad” por su mal partido frente al Valencia, con un más que meritorio triunfo ante un CSKA Moscú que estaba diez puntos arriba a inicios del último cuarto. La prueba de carácter que solicitaba a los suyos el técnico lituano llegó en esos últimos diez minutos, en los que a pesar de la lesión de Nick Calathes el Barça cambió el signo del partido, ganó y recuperó el liderato de la Euroliga.
El 81-73 final premiaba el tesón de un Barça que, aunque lejos de firmar un partido perfecto, fue mejor durante más minutos. Porque el duelo fue una montaña rusa, con parciales imponentes a favor de unos y otros. Para entender esos vaivenes basta decir que el Barça mandaba por 14 puntos en el minuto 21 (41-27), perdía por diez a inicios del último cuarto (5161) y acabó ganando por ocho.
Los dos equipos llegaban al duelo con urgencias. El Barça había perdido tres de sus últimos seis partidos y el CSKA, cinco de seis. Las críticas de Saras por la falta de solidez de sus jugadores añadían un ingrediente extra de presión y todo ello se notó en los primeros 15 minutos, con los dos equipos peleando el partido desde la trinchera y avanzando metro a metro y canasta a canasta con marcador bajo y escasas diferencias. tras el 22-19 del minuto 14 cuando Kyle Kuric cogió su fusil para despegar al Barça, una tarea a la que se le sumó poco después Nikola Mirotic, que inauguró su anotación tras 17 minutos pero lo hizo con 7 puntos seguidos para despegar al Barça (36-24).
Parecía que el Barça se encaminaba hacia una cómoda victoria (41-27) pero entonces irrumpió ohannes Voigtmann. El ex baskoFue nista encadenó tres triples seguidos en un minuto (41-26) y conectó a sus compañeros al partido, sobre todo a Tornike Shengelia. Entre los dos lideraron un espectacular parcial de 4-24 que le dio la vuelta al marcador (45-51), estirado hasta un 13-33 a final de cuarto (51-60).
El Barça, noqueado por momentos, supo sacar fuerzas de flaqueza en el último cuarto en un encomiable ejercicio de autoestima. Después de que Grigonis colocara la máxima rusa (51-61), los de Jasikevicius firmaron un parcial de 11-0 para volver al encuentro. Seis puntos de Mirotic dieron el mando al Barça (68-64) y entre las penetraciones de Jokubaitis y el juego al poste de Davies el Barça sentenció un partido que tuvo que ganar dos veces ●