Un gran Nainggolan frena la ascensión del Inter
La Roma, a 7 puntos de la Juve, ganó en San Siro con dos golazos del belga
La Roma está dispuesta a luchar por el ‘scudetto’ hasta el final y ayer logró un importante triunfo ante el Inter en San Siro (1-3) que le mantiene segunda a 7 puntos de la Juventus. Dos golazos de un Radja Nainggolan en estado de gracia dieron a los ‘giallorossi’ su 8ª victoria en las últimas 9 jornadas. Los ‘nerazzurri’ ven frenada su buena racha de resultados y ceden la quinta plaza al Lazio, que venció al Udinese (1-0).
La Roma fue superior en la primera parte y Nainggolan puso el 0-1 sacándose de la chistera un gran disparo con rosca desde el vértice del área que se coló por la escuadra opuesta. El belga lleva 5 jornadas consecutivas marcando.
Un Inter poco lúcido tuvo su primera ocasión clara antes del descanso. En la segunda mitad mejoró y tuvo el empate en dos acciones antes de que Nainggolan golpeara de nuevo con otro gol de bandera. Recogió el balón en su campo, avanzó solo y, al no salirle nadie, soltó un obús por el ángulo (56’). Es su 9º gol.
El 0-2 dejó tocado al Inter, pero Icardi puso emoción durante unos segundos al empujar un centro de Perisic tras pase entre líneas de Gagliardini (81’). En la siguiente jugada Medel arrolló a Dzeko en un balón largo y Perrotti transformó su 7º penalti en esta Serie A(85’). El exazulgrana Vermaelen disputó los últimos minutos.
Último partido de Berlusconi
El Milan, séptimo, ganó al Sassuolo en el último partido de la ‘era Berlusconi’ (0-1) gracias a un gol de penalti obra de Bacca con polémica (22’): el tanto debió ser invalidado, ya que el colombiano resbaló y tocó el balón dos veces, una con el pie derecho y otra con el izquierdo. Poco antes, en el 12’, Donnarumma, que el sábado cumplió 18 años, le paró otra pena máxima a Berardi.
Gran primera mitad de Deulofeu
Gerard Deulofeu, omnipresente, llevó a cabo una buena primera parte y Consigli frustró su gol con una gran intervención (18’). Fue un encuentro histórico. Esta semana el Milan cambia ya de propietario y estará en manos de un grupo chino, concluyendo la etapa de Berlusconi como dueño del club desde 1986