UNA BODA 10
Leo y Antonela se dieron el “sí quiero” en una ceremonia que fue el evento del año en Rosario Todo salió a la perfección y ambos vivieron su noche más feliz junto a 250 invitados Ahora toca luna de miel en el Caribe pero atentos a una renovación que aún n
La boda de Leo y Antonela fue el acontecimiento del año en Argentina. El enlace generó una expectación mediática nunca vista ante un enlace de este tipo y la ciudad de Rosario se volcó para ver casarse a su hijo predilecto. La ceremonia empezó con retraso, como mandan los cánones, pero todo salió a la perfección y Messi y Antonela vivieron su noche más feliz, una boda 10.
El City Center de Rosario se convirtió en el centro de todas las miradas. El complejo que albergó “la boda del siglo”, como la definieron los medios de comunicación argentinos, fue un hervidero de unidades móviles de televisión, de centenares de aficionados y se convirtió también en un fortín inexpugnable, ya que las medidas de seguridad fueron de primerísimo nivel. Incluso el máximo responsable de seguridad del gobierno argentino se desplazó personalmente a Rosario para supervisar el operativo.
Poco antes de las nueve de la noche, hora argentina, Leo Messi y Antonela Roccuzzo se dieron el “sí quiero” ante unos 250 invitados, con la presencia de su hijo Thiago como artista invitado en el altar y con sus hermanos, Matías, Rodrigo y María Sol por parte del azulgrana y Carla y Paula por parte de la novia, como testigos.
Tras darse el “sí quiero” y contraer matrimonio por lo civil, Leo Messi y Antonela acudieron a la alfombra roja, en la que 150 periodistas de todo el mundo esperaban ansiosos para poder tomar las primeras imágenes de los recién casados. Apenas estuvieron un minuto y medio ante los medios, tiempo suficiente para ver a Messi más relajado que nunca, sonriente, sin soltar la mano de su esposa en ningún instante. Antonela mostraba orgullosa lo que aquí llaman el libro de casamiento, es decir el libro de familia que certifica su matrimonio con Messi.
Se rompió el protocolo y el azulgrana besó a la novia varias veces, en una imagen inédita hasta ahora de ambos en público. Como si fuera un balón, Leo quiso recolocar la cola de el vestido de la novia con un elegante toque con su mágico pie izquierdo, hasta que salieron al rescate las hermanas de Antonela para que todo estuviera en su sitio. Parte de la prensa, con la mayoría de televisiones argentinas emitiendo el momento en directo, también rompieron el protocolo con aplausos, gritos de ‘viva los novios’ e incluso un “Leo quédate en Newell’s”. Messi se giró, guiñó el ojo a la prensa y siempre con Antonela de la mano, se retiró sonriente para acudir a la cena y la posterior fiesta, de nuevo en la intimidad de los amigos y la familia. Tras ellos aparecieron sus padres, Jorge y Celia, junto a su hermana María Sol, para posar ante los medios. El padre del jugador comentó que “Leo está muy feliz, estamos todos muy felices. Es el partido más importante de su vida”.
¿Escala en Barcelona?
Leo y Antonela tienen doce días para disfrutar la luna de miel antes de la pretemporada. El destino es el Caribe, aunque podrían pasar antes por Barcelona. Sin embargo, no hay fecha aún para su renovación