Empate con buenas sensaciones
El equipo de Eusebio Sacristán no paso del 1-1 ante el Saint Etienne en el último partido antes de la gira de los donostiarras
Empate en el tercer amistoso y primeras pinceladas reales de lo que puede ser la Real. Debutó Illarra tras el descanso, fue alineado con Zurutuza y Prieto, y el fútbol comenzó a fluir y se hizo reconocible. Januzaj gozó de 45 minutos y dejó destellos de futbolista distinguido, de origen múltiple y nacido en Bélgica, pero de ADN futbolístico puramente brasileño. Pero el que marcó, el pan y la sal y del gol, fue de nuevo Eneko Capilla, el ‘Pichichi’ de la pretemporada con tres tantos. En vísperas de ir a la gira, la Real está en Capilla.
A los realistas les costó tres minutos hacerse presentes en el campo. Y los galos aprovecharon esa caraja sesteante para marcar un gol y estar a centímetros de doblar la marca. A los 20 segundos, el Saint Etienne se adelantó por mediación de Tannane. Kevin, un tanto temerario, salió a buscar un balón al que no llegó casi hasta mediocampo, dejando un socavón a su espalda que exploró el fornido Pierre Gabriel. El goleador Tannane recibió sin oposición, y sin ángulo, pero Rulli, en sus primeros segundos de acción del verano, fue a cazar el previsible pase de la muerte y dejo desprotegido el palo corto, por donde le colaron el cuero.
Sólo dos minutos más tarde, el meta argentino se resarció interponiendo sus dedos entre el obús de Dabo y la portería. El inicio fue calcado al de cuatro días antes contra el Girondins en Irun, pero en este caso con la consecuencia del gol. A partir de ahí, el equipo de Eusebio se ajustó en defensa y comenzó a monopolizar el esférico hasta encajonar al equipo francés en el último tercio de campo.
Gorosabel por la derecha fue quien primero agitó el gallinero con sus cabalgadas . Le siguió Januzaj, que, bien sincronizado con Kevin pegado a la banda izquierda, se entregó a la diablura. Lo suyo es un manantial de recursos. Cuando los complemente con una condición física manifiestamente mejor y un óptimo entendimiento con sus colegas, puede ofrecer noches de pasión.
La Real sabía juntarse y superar líneas haciendo rondos, pero le faltaba velocidad para crear verdadero peligro. Una volea de Juanmi tras una sensacional jugada y centro de Navas pegó en un defensa cuando se colaba, lo mismo que el misil de Guevara desde la frontal, tras un intento de cabezazo de un muy rocoso y autoritario Elustondo. También lo intentó Juanmi, pero no aprovechó la dejada de pecho de Canales porque se le anticipó un zaguero del Saint Etienne.
La ley de Illarramendi
En la segunda parte, la Real se puso al servicio de la inteligencia y la calidad de Illarramendi y se encendieron las luces, aunque también se abrió el choque. Por primera vez en lo que va de verano, Eusebio pudo alinear a su medular predilecta, la que forma el mutriku arra con un re cu pera doZurutuz ay el indestructible Prieto. La Real comenzó a planear con su juego. Puso la velocidad de crucero. El propio Illarra fue el autor de la ocasión más clara, un potentísimo chut con la zurda que sucedió a un robo y a un quiebro. El poste evitó que el ‘4’ se estrenara en pretemporada con un ‘txitxarro’ de enmarcar.
También disputó sus primeros minutos de la pretemporada Gaztañaga, que parecía proscrito hace sólo unos días. Lo hizo como central, ofreciendo un alto nivel. Toño se lució sacando de la escuadra un libre directo de Tannane y, previo al gol del empate, Concha hizo lucirse al meta Ghezali. En la jugada posterior, el córner lanzado con rosca e intención por Merquelanz lo peinó Gaztañaga para que Capilla fusilara a la red. Tras la victoria en Elgoibar (0-5) y la derrota ante el Girondins (0-1) y antes de su ‘stage’ en Holanda, adonde se desplaza mañana, la Real igualó ante el Saint Etienne en Biarritz en un partido con mucho ambiente y muchos espectadores que ayudarán a la práctica del euskera en Iparralde
Cuando tenga una condición óptima y se entienda con los suyos, Januzaj va a dar mucho
La caraja inicial y el fallo de Kevin y Rulli provocan el gol galo ¡a los 20 segundos!