Barcelona tiene poder
En el acto institucional las autoridades destacaron la ciudad, el legado y las figuras de Maragall y Samaranch
Parafraseando la célebre rumba, Barcelona’92 sigue teniendo poder. El Palacete Albéniz fue el escenario del acto institucional del 25º aniversario de los Juegos Olímpicos con presencia de las distintas autoridades y representantes de la sociedad civil, el mundo empresarial, la política y el deporte. Todos, sin excepción, alabaron la ciudad y el legado olímpico en un acto con un emocionado homenaje a Pasqual Maragall. Y también palabras sentidas para el presidente del COI entonces, Juan Antonio Samaranch.
El rey Felipe VI presidió un acto que contó también con la presencia, entre otros, del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; y los presidentes del Comité Olímpico y Paralímpico, Thomas Bach y Philip Craven. También asistió el ex alcalde Pasqual Maragall, uno de los grandes impulsores de los Juegos. Parte de su discurso en aquella inauguración abrió el acto. “Gràcies Pasqual, el motor de los Juegos para hacer este sueño realidad. Te queremos. Orgullosos de que fueras nuestro alcalde”, dijo Colau, emocionada al dirigirse a Maragall. ”Barcelona’92 fue una fiesta cívica y democrática”, añadió.
Bach, en castellano, y Craven tuvieron palabras de recuerdo y gratitud para Samaranch. “Estaría muy orgulloso de celebrar este momento. Siempre recordaré mi amistad con él. Los Juegos de Barcelona unieron a un mundo previamente dividido”, afirmó el máximo dirigente del olimpismo aludiendo a la extinta Unión Soviética, la Alemania reunificada y el regreso de Sudáfrica en aquellos Juegos. “Nelson Mandela decía que el deporte tiene el poder de cambiar el mundo, y ese poder se manifestó de una forma increíble en Barcelona. Animo a la ciudad de Samaranch, que tanto amaba, a valorar sus méritos históricos. Barcelona fue un catalizador abriéndose al mar y al mundo. Uno de los mejores ejemplos del legado de Barcelona’92 fue el CAR de Sant Cugat, con la mejor actuación española de la historia”, agregó Bach.
“Gracias a Maragall y Samaranch fue posible que los mejores Juegos de la historia hablasen en catalán”, dijo el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont.
“Hasta entonces los Juegos se celebraban en una ciudad, pero en Barcelona por primera vez los Juegos fueron de una ciudad. No solo fueron un acontecimiento deportivo inigualable, sino una demostración cívica, una gran celebración ciudadana que los convirtió en irrepetibles. Una gran celebración de amistad, de alegría, de ilusión y de compañerismo”, destacó el rey Felipe VI, que fue el abanderado español en la inauguración de Barcelona’92, entonces como regatista olímpico y príncipe de Asturias.
Tras recordar los emocionantes momentos vividos antes de salir en el Estadi Olímpic y, sobre todo, como deportista, Felipe VI dijo que “la inauguración fue el momento que habíamos esperado tanto. No podíamos fallar y no fallamos”, para concluir destacando los valores que dan sentido a los JJ.OO. “La búsqueda de la excelencia desde la honestidad, la competitividad acompañada siempre del respeto por el competidor, la rivalidad unida al compañerismo, la amistad, el juego limpio y el respeto a las reglas. Una auténtica escuela de vida”
Ada Colau Gràcies Pasqual por hacer este sueño realidad. Te queremos. Orgullosos de que fueras nuestro alcalde”
Thomas Bach Animo a la ciudad de Samaranch, que tanto amaba, a valorar sus méritos históricos”
Rey Felipe VI Concluidos los Juegos, fue apabullante el sentimiento de orgullo de toda España hacia esta ciudad. Hasta entonces los Juegos se celebraban en una ciudad, pero en Barcelona por primera vez los Juegos fueron de una ciudad”