LA NBA, EN ACCIÓN
La pretemporada ya está en marcha después de un verano repleto de traspasos muy sonados Varias estrellas han cambiado de aires y han creado un buen número de ‘súper equipos’
La NBA ha comenzado su andadura disputando sus primeros partidos de pretemporada después de un excepcional verano marcado por la gran cantidad de movimientos de jugadores importantes que ha habido, un hecho que ha dado lugar a la formación de plantillas con varias súper estrellas. Golden State Warriors ha conseguido mantener al núcleo de su equipo campeón, con Kevin Durant, Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green e incluso Andre Iguodala, lo cual coloca el listón muy alto para el resto. Para superarlo o al menos para intentarlo, otras franquicias han tomado decisiones radicales. Cleveland Cavaliers, por ejemplo, ha juntado a LeBron James, Isaiah Thomas, Dwyane Wade y Kevin Love. Boston Celtics ha reunido a Gordon Hayward, Al Horford y Kyrie Irving y Oklahoma City Thunder contará con Russell Westbrook, Paul George y Carmelo Anthony, sin olvidar a San Antonio Spurs, que disfruta de Kawhi Leonard, LaMarcus Aldridge y el propio Pau Gasol, Houston Rockets, con James Harden y Chris Paul, o los emergentes Minnesota Timberwolves con Karl-Anthony Towns, Andrew Wiggins y Jimmy Butler.
Ha sido una verano movido en los despachos. El talento, en definitiva, se ha concentrado y ha dado lugar a lo que se califica ya como ‘superteams’ (súper equipos). La impresionante pujanza económica de la NBA lo permite. El límite salarial en esta temporada está fijado en 99 millones de dólares –lo que significa que ha crecido en 36 millones en los últimos años–, aunque muchos superan ampliamente esa cifra mediante el pago del denominado ‘luxury tax’ (impuesto de lujo’), como, por ejemplo, los finalistas de la pasada campaña, Warriors y Cavaliers, que están por encima de los 130 millones. Estos ‘superteams’ son los que lucharán por estar en los puestos destacados del playoff, con una Conferencia Oeste que se presenta, como viene siendo ya habitual en los últimos tiempos, con más cantidad de talento. Acapararán gran parte de la atención mediática, pero también lo harán en bastante medida proyectos que generan ilusión, como es el caso de Los Angeles Lakers con Lonzo Ball y el resto de jóvenes talentos que tiene en sus filas y Philadelphia 76ers, que también presenta muy buena pinta. Todo ello aderezado con la presencia de nuevos jugadores internacionales, como es el caso de Bogdan Bogdanovic, Milos Teodosic o Ante Zizic,
La NBA, sin embargo, ha demostrado que no pierde el tiempo a la hora de resolver los problemas que puede tener y ha atacado la práctica del ‘tanking’ (no esforzarse en ganar partidos cuando ya no se tienen opciones de playoff para conseguir así una mejor posición en el ‘draft’). A partir de 2019 se sortearán las cuatro primeras posiciones del draft y no tres como hasta ahora, lo que pretende desincentivar a aquellos equipos que piensen en que es más beneficioso quedar en las últimas posiciones. Por ejemplo, ante el último tenía un 25 por ciento de posibilidades de elegir en el número uno, pero ahora tendrá un 14 por ciento.
Otro problema era el de la saturación de partidos en el calendario, con muchos ‘back to back’ (encuentros en dos noches consecutivas) y cuatro compromisos en cinco noches, algo que se ha arreglado ampliando una semana la competición y aprovechando los viajes para disputar más de un choque. Eso sí, a cambio los equipos no podrán dar descanso a sus
estrellas y menos en partidos retransmitidos por televisión a nivel nacional, a menos que quieran recibir una multa realmente cuantiosas, de hasta 100.000 dólares.
La NBA, en definitiva, sigue por una senda de crecimiento y hegemonía global en la que no se adivinan problemas. Es conocida como la mejor liga de baloncesto del mundo y seguramente lo es más que nunca